En un cuarto del tercer piso de una casa surcana, de esas que poco a poco están desapareciendo de la ciudad, están Susana Cebrián y Hernando Suárez sentados en una silla giratoria de escritorio y un puf rojizo. Ella viste un polo negro con un estampado de Los Caballeros del Zodiaco y él uno de color entero, que por la poca iluminación del cuarto parece ser color morado. Rodeados dos sintetizadores ochenteros, varias guitarras y una gran colección de discos, están hablando y cuestionándose sobre algo que para muchos podría parecer una locura: ¿puede un disco de pop remitir a las dudas y más oscuros pensamientos del ser humano? Aunque ambos consideran que sí, que es posible, no tardan en debatir la razón por la cual es un género que para el ideario popular, solo habla de alegrías. “No tiene por qué siempre hablar de lo mismo”, coinciden. Incluso se animan a afirmar que la enérgica rebeldía del punk no debería circunscribirse únicamente a los acordes distorsionados o letras agresivas.
Ambos creen haber logrado mezclar todas esas sensaciones en Gomas, banda que lideran desde el 2012 y que, aunque se vale de melodías color rosa, esconde profundas y nebulosas reflexiones en sus letras. Cebrián, la vocalista y letrista, considera que al inicio “pasa ligera”. Sin embargo, Suárez, bajista y productor del grupo, no está seguro si lo que hacen es totalmente chicloso. “A veces puede ser música muy juguetona pero en otros momentos no”, duda.
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Esa ambivalencia queda demostrada en “Amuleto” (A Tutiplén Records, 2016), su primera producción, en cuyas canciones abundan las inseguridades, las mismas que danzan en contrapunto con los alegres silbidos y las melodías pegajosas.
Tal es el caso de “Al gomas”, canción que coquetea con el pesimismo al meditar sobre la nula repercusión de las acciones con frases como “¿Qué se le puede decir? ¿Qué se le puede hacer? Así nos vamos a quedar. Al final seremos igual”. O de “Novata”, en la que con preguntas como “¿Por qué te vas así nomás?” o “Menos no es más, ¿nunca vendrás?”, se plantea una imaginaria conversación con el líder de la desaparecida banda Pestaña, Leonardo Castillo, quien se suicidó en el 2011.
“Amuleto” esconde un universo de preguntas sin respuesta, arropadas con música hecha para bailar y divertirse. Un interesante lanzamiento que se presenta como un precioso atardecer y que al mismo tiempo rebela los abismos sentimentales de sus autores.
MÁS INFORMACIÓNSu música se puede escuchar en Spotify, Apple Music, iTunes y Deezer.
El disco puede ser adquirido en El Grito, Galerías Brasil, Lazyitis Discos, Ciudad Disco, Enigma Discos y otras discotiendas.