Julieta Venegas perdió la demanda por la custodia de su hija Simona y deberá, a partir de la fecha, permitir que Rodrigo García Prieto, el padre de la niña, la vea con cotidianeidad y lleve su apellido.
Según informó la edición online del diario que inició en el 2012 la demanda contra Julieta Venegas.
Rodrigo García Prieto aseguraba que la cantante mexicana, con quien tuvo una relación en el año 2009, le había prohibido ver a la niña y la había registrado con apellidos que no eran los suyos.
El argentino, que pensó que Venegas había registrado con otro apellido a la niña por un tema de privacidad, no podía ver a su hija desde el mencionado año. Sus familiares incluso aprovecharon el más reciente concierto de la mexicana en Buenos Aires para pedirle que cambie de actitud.
Mientras Venegas se presentaba en el Gran Rex, la abuela paterna de García Prieto se presentó en las puertas del teatro para rogarle a la cantante que le permitiera ver a Simona.
Solo este año el argentino tuvo una respuesta de la justicia, quienes además de reconocerle sus derechos le recomendaron a Julieta Venegas iniciar una terapia psicológica para “resolver sus problemas emocionales”.
Días atrás, Rodrigo había publicado el siguiente mensaje en su cuenta de Twitter:
Pronto juntos, nunca tendrías que haber pasado está miseria, lo lamento mucho. pic.twitter.com/JelvI9io7q— RODRIGO (@Ro_papadeSimona) febrero 17, 2014
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