FRANCISCO MELGAR WONG
“World Peace Is None Of Your Business”, el disco más reciente de Morrissey, nos trae al ex vocalista de The Smiths en su modalidad más crítica con el mundo contemporáneo.
Desde la canción que abre -y da nombre al disco- el veterano rockero expone ante nosotros las miserias del género humano. Policías abusivos, gobiernos corruptos, elecciones arregladas de antemano, “Oh y tú pobre tonto,” nos dice, “con tu voto apoyas el proceso”.
Tomando esta canción como punto de partida, el disco se despliega como una exhibición de atrocidades estructurada sobre dramáticos arreglos musicales que le añaden intensidad y melodrama al transcurso de las canciones. Hombres adictos al trabajo, mujeres que sólo esperan el sueldo de sus esposos, jóvenes que se alistan en el ejército para asesinar y ser asesinados, estos son algunos de los personajes con los que Morrissey ha elegido poblar el mundo que exhibe en “World Peace Is None Of Your Business”.
Pero no todo es oscuridad.
Los momentos de redención llegan cuando el ex vocalista de Smiths nos exhorta a tomar la vida en nuestras manos. Como cuando le dice al esposo explotado que deje a su esposa abusiva y “atesore el día”. O cuando frente a la destrucción del medio ambiente el propio Morrissey declara: “No soy un hombre, nunca asesinaré o devoraré a otro animal y nunca destruiré al planeta en el que vivo, bueno, ¿qué crees que soy? ¿Un hombre?”
Al finalizar la placa nos deja la sensación de que sí podemos hacer algo por el mundo: mejorarnos a nosotros mismos. En ese sentido, Morrissey recuerda las palabras que el filósofo alemán Ludwig Wittgenstein le dijo a uno de sus alumnos: “Simplemente mejórate a ti mismo. Eso es todo lo que puedes hacer para mejorar el mundo”.
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