La cantante Rihanna aprovechó su visita a Auckland (Nueva Zelanda), para realizarse un nuevo y doloroso tatuaje a través de una tradicional técnica Maorí, llamada Ta Moko.
Tiki Taane, un músico local y amigo de la cantante, fue el encargado de fijar el nuevo grabado en su mano derecha (unas flechas que suben desde la punta de sus dedos hasta el antebrazo), a través de una técnica que propició que la intérprete sea sometida a un profundo dolor que, según se puede apreciar a través de un video subido a YouTube, soportó con gran entereza.
A diferencia de las técnicas modernas y las agujas eléctricas que tratan de suavizar el dolor inherente a la perforación de la piel, el método Ta Moko utilizado por los descendientes de los aborígenes neozelandeses solo hace uso de una púa, un cincel y la dosis de tinta negra necesaria para hacer el trabajo.