El presidente Juan Manuel Santos anunció hoy que ordenó la militarización de Bogotá luego de violentos disturbios escenificados la víspera en varias localidades y que dejaron dos muertos.
He tomado decisiones para asegurar la normalidad Ordené la militarización de Bogotá, dijo Santos en una alocución desde la casa de gobierno. El presidente no dijo hasta cuándo se extendería tal medida ni cuántos uniformados estarán en esa tarea, pero la presencia de soldados en las calles en sectores de la ciudad era notable.
Jorge Rojas, secretario del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, dijo que el anuncio del mandatario no significa que esta ciudad de ocho millones de habitantes se encuentre en estado de sitio o que las autoridades civiles se sometan a las militares, sino un reforzamiento de la presencia de los uniformados porque la policía no puede atender todos los puntos de la capital donde se han presentado incidentes desde la víspera.
La militarización significa sólo un reforzamiento (de la seguridad) y está concertado y bajo la autoridad civil, dijo Rojas a la AP.
¿EFECTO MEDIÁTICO? Por su parte el analista político y ex alcalde de Bogotá (1992-1994), Jaime Castro, indicó en entrevista telefónica que la declaración de Santos busca un efecto mediático para salir al paso de los desórdenes de la víspera. Agregó que la capital en varias ocasiones ha acudido a ese reforzamiento como en actos de toma de posesión de presidentes o tras atentados como el ocurrido en un club del norte de la ciudad en febrero del 2003 y cuando un coche bomba provocó la muerte de 36 personas.
La militarización no significa que haya nuevas leyes o que los militares asuman funciones jurisdiccionales frente a los civiles o que puedan realizar allanamientos o cosa parecida, dijo Castro. Los militares van actuar acompañando a la policía, reforzando a la policía, indicó Castro.
NÚMEROS DEL EJÉRCITO EN BOGOTÁ En Bogotá existe una brigada del ejército con al menos 14.400 hombres, indicó el general Gabriel Pinilla, comandante de la denominada Brigada 13 que es la que opera en la capital. Pinilla dijo que Bogotá siempre ha tenido esa presencia militar y que ahora lo que están haciendo es reforzar varios puntos de la ciudad, en una medida transitoria, pero no precisó la fecha. El oficial dijo que estaba en una reunión con mandos militares evaluando la situación de seguridad.
Al menos 500 de ellos ya fueron despachados desde anoche a población de Soacha, en el central departamento de Cundinamarca y vecino a Bogotá. Los disturbios se presentaron la víspera y en medio de marchas llamadas por universitarios en apoyo de pequeños campesinos que están en paro desde el 19 de agosto.
El presidente anunció también que dispuso que 50.000 hombres de las fuerzas militares apoyen a la policía en las carreteras donde se han presentado bloqueos por parte de manifestantes desde el inicio del paro.