Buenos Aires. La Fiscalía argentina estudia reemplazar al fallecido fiscal de la causa por el atentado terrorista contra la mutual judía AMIA en 1994, Alberto Nisman, con hasta tres procuradores que continúen la investigación, según informaron fuentes de la institución a medios locales.
La procuradora general argentina, Alejandra Gils Carbó, se reunirá durante la próxima semana con asociaciones de víctimas y querellantes antes de definir el reemplazo, según informó el diario La Nación.Seguir a @Mundo_ECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Según las fuentes, la intención del Ministerio Público Fiscal es escoger nombres experimentados y de trayectoria irreprochable, que además no formen parte del círculo de fiscales más próximos a Gils Carbó para dar un mensaje conciliador.
La decisión de optar por tres fiscales responde a la complejidad de la causa y a que ninguno de ellos se dedicará a tiempo completo a la investigación, como hacía Alberto Nisman, sino que seguirán a cargo de sus respectivas fiscalías.
Tras la muerte de Nisman, Procuración nombró como fiscal sustituto provisional, hasta el 31 de enero, a Alberto Gentili, que se ocupaba de cubrir al fallecido fiscal durante las vacaciones al frente de la unidad fiscal especial a cargo de la causa AMIA.
Alberto Nisman fue encontrado muerto en la noche del domingo al lunes pasado con un tiro en la sien, horas antes de tener que comparecer en el Congreso para explicar una denuncia interpuesta cinco días antes contra la presidenta y varios de sus colaboradores.
En su demanda, Nisman acusa a la presidenta de orquestar un plan de encubrimiento a los supuestos terroristas iraníes responsables del atentado contra la mutual judía AMIA, que dejó 85 muertos en 1994, a cambio de presuntamente intensificar las relaciones comerciales con Irán.
Aunque las pericias descartan en principio la intervención de terceras personas, la investigación aún no ha confirmado la hipótesis del suicidio mientras crece la polémica en términos políticos.
Fuente: EFE