EDSON ROBLEDANO Especial para elcomercio.pe
En el día de los Patriotas, un feriado celebrado con pompa en Boston, Massachusetts, la gran maratón transcurría sin contratiempos a lo largo de su recorrido. Pero una horrible tragedia aguardaba en la línea final. La zona de Back Bay estaba llena de personas y aficionados a la competencia de alto rendimiento. Espectadores de diversas partes del mundo, incluyendo peruanos, se juntaron para ver los resultados del día y alentar a los corredores.
A las 2:50 pm se produjo una explosión en la calle Boylston, cerca de la línea de meta, y 15 segundos después hubo otro estallido a cincuenta pies del primero.
CAOS COMPLETO Inmediatamente después, policías y encargados de seguridad empezaron a evacuar al público asistente y se dio inicio a la ayuda para los heridos. Todo alrededor se volvió un caos total: el público no sabía lo que había sucedido, personas evacuando rápidamente el área, y otros ayudaban a la gente herida alrededor. Varios afectados fueron trasladados en silla ruedas para que sean asistidos.
Los pocos enfermeros que estaban en las carpas de emergencia, también ayudaron a las personas intentando cerrar sus heridas y que no se desangren. Los heridos fueron llevados a al Boston Medical Center, MGH (Mass General Hospital), Tufts Medical Center, entre otros hospitales más cercanos.
Algunos medios han informado que personas resultaron con partes del cuerpo desmembradas debido a la potencia de la explosión. Charcos de sangre se vieron en el lugar de las explosiones. Oficialmente se ha informado que el aparente atentado dejó cien personas heridas y por el momento tres muertos, entre ellos un niño de ocho años.
MÁS BOMBAS Minutos después del atentado se cerró la calle de Boylston prohibiendo el ingreso de todas las personas. Al lugar llegaron más agentes policiales, policías federales, el FBI, bomberos, ambulancias, equipos SWAT y el equipo especial de bombas. Se encontraron dos dispositivos explosivos más en la zona del atentado que fueron desarmados y luego extraídos de la escena para que sean investigados.
El gobernador Thomas Menino habló hablado con el presidente Barack Obama, el cual le dijo que tenía todo su apoyo y el del país. Además que ponía a su disposición a todos los agentes federales para encontrar al culpable o culpables de este horrible hecho. De momento no se ha sindicado a un responsables.
INTERROGARON A HERIDOS Ninguno de los testigos de la tragedia ha brindado una pista clave para saber de algún sospechoso, según los agentes de la ciudad. Varios policías acudieron a los hospitales para hablar con los heridos para saber si habían visto a alguien que le parecía extraño o si habían visto algún bolso o mochila que haya sido dejada en algún lugar en especial.
Los agentes federales también han logrado interrogar a ciertos sospechosos, en especial a un joven estudiante que solamente tiene una visa de permiso de estudios pero nada muy concreto todavía.
En Boston, la gente ora por las personas fallecidas y por los heridos. La ciudadanía espera que el presidente Barack Obama cumpla su palabra y haga sentir el peso de la ley a los culpables de esta horrible tragedia.