La investigación para saber qué provocó la desaparición del avión de Malaysia Airlines podría no llegar a conclusiones, mientras tampoco hay certidumbre de que las aeronaves que buscan sus rastros encuentren algo, dijeron autoridades el miércoles.
La evaluación de autoridades malasias y australianas subraya la falta de información sobre lo que sucedió con el vuelo MH370. También pone de relieve un escenario que cada vez parece más probable: que el destino del Boeing 777 y las 239 personas que llevaba a bordo jamás se conozca y permanezca en el misterio para siempre.
El avión desapareció el 8 de marzo cuando viajaba de Beijing a Kuala Lumpur luego de que sus trasponedores, que hacen a la nave visible en los radares comerciales, fueron apagados. Radares militares ubicaron al jet poco menos de una hora después al otro lado de la península malasia.
Autoridades dicen que hasta ese momento “los movimientos fueron consistentes con acciones deliberadas tomadas por alguien a bordo del aeroplano” pero no han descartado ningún factor, ni siquiera una falla mecánica.
La policía investiga a los pilotos y la tripulación en busca de cualquier evidencia que sugiera el secuestro o el sabotaje. Los antecedentes de los pasajeros, de los cuales dos tercios eran chinos, han sido revisados por investigadores nacionales e internacionales y no se ha encontrada nada sospechoso.
“Las investigaciones pueden seguir y seguir. Tenemos que aclarar cualquier aspecto, por pequeño que sea”, dijo el inspector general Khalid Abu Bakar a periodistas en Kuala Lumpur. “Al final de las investigaciones quizá no conozcamos la causa real de lo que pasó. Tal vez ni siquiera conozcamos la razón de este incidente”.