Ésta fue una semana de violencia en el este de China.
La explosión el jueves de dos carros-bomba en una plaza de mercado ubicado en Urumqi, la capital de la región de Xinjiang, dejó al menos 31 personas muertas y muchos heridos. El mismo día, otro ataque con bombas que dejó al menos 90 heridos.
Los medios de comunicación estatales de China informaron este viernes que el hecho pudo haber sido perpetrado por cinco atacantes suicidas.
El Ministerio de Seguridad Pública del país lo calificó de “un violento acto terrorista”.
Pero es mucho más que un simple acto de terror. El múltime atentado revivió uno de los conflictos internos que más preocupan al gobierno del gigante asiático: la demanda separatista de la minoría musulmana de los uigures.
Además, la zona donde explotaron los carros-bomba, la provincia de Xinjiang, ha sido el escenario de una tensa disputa entre musulmanes y miembros de la etnia Han, que es mayoritaria en el país.
BBC Mundo se lo explica con tres preguntas.
1. ¿Quiénes son los uigures?
Este grupo ha sido responsabilizado de los ataques con bomba en la plaza de Tiananmen en Pekín, en octubre del año pasado, que no dejaron muertos, y la matanza con cuchillos en la estación de trenes de Kunming, en la provincia suroccidental de Yunán, donde fallecieron 31 personas en marzo de este año.
Para los uigures, una de las 56 etnias que existen en China, mantenet la identidad musulmana es algo fundamental. Pero más allá de su fe, hay algunos aspectos culturales que los distinguen de la población de otras regiones del país.
Una de esas características es el lenguaje, muy influido por el turco, y muchas de sus costumbres son parecidas a las que se ven en las naciones del Asia Central y que limitan con la región de Xinjian, como Kazajstán, Rusia, Tayikistán y Afganistán.
De hecho, el gobierno chino afirma que muchos de los que han perpetrado ataques en territorio chino se refugian en esos países para evadir a las autoridades.
“Con el auge económico de China, el gobierno central ha hecho una gran inversión en esta región del país, que considera estratégica, pero que ha causado una gran incomodidad en muchos líderes étnicos, que no quieren la influencia del Partido Comunista chino en su zona”, explica la editora del Servicio Chino de la BBC, Yuwen We.
Esta influencia de la que habla Yuwen es considerada por los uigures como una “invasión” y una amenaza a sus tradiciones por parte del gobierno de Pekín y los integrantes de la etnia Han a la región de Xinjiang. Esto ha sido el eje de la tensión y uno de los posibles orígenes de los ataques.
Además, Xinjiang no siempre perteneció a China. Después de varios siglos de independencia, se convirtió en provincia china en el siglo XVIII, por lo que algunos de sus habitantes quieren regresar a la situación previa de autonomía.
2. ¿Cambiaron los separatistas de estrategia?
Durante años el reclamo separatista de los uigures había sido relativamente anónimo. Sin embargo, en ocasión de los Juegos Olímpicos de 2008 comenzaron a hacerse escuchar con varias jornadas de protestas.
Sin embargo, esas manifestaciones no tuvieron ningún resultado, así que las marchas escalaron a la violencia en julio de 2009, cuando murieron al menos 200 personas –la mayoría de ellas pertenecientes a la etnia considerada “invasora”, la Han- durante disturbios en la ciudad de Urumqi.
Desde entonces los ataques se han repetido a lo largo del país, cada tanto con mayor gravedad.
Primero fueron las bombas en la Plaza Tiannamen en octubre del año pasado, sin víctimas, pero con una gran impacto mediático.
Después ocurrió el ataque a la estación de trenes de la ciudad de Kunming, donde varias personas armadas con cuchillos mataron a 31 personas y dejaron heridas a otras 120, considerado uno de los hechos violentos más graves registrados en China en tiempos recientes.
En aquel momento el ministro de Relaciones Exteriores de China, Qin Gang, calificó el hecho como “carente de consciencia y humanidad”.
Pero ahora los separatistas parecen haber trasladado nuevamente el conflicto a su región, sin utilizar armas convencionales como cuchillos o fusiles, que habían sido usadas en atentados anteriores.
Según medios locales chinos, el ataque suicida de esta semana es inusual y se identifica más con las estrategias de combate de los grupos extremistas.
Sin embargo, queda la interrogante de qué agrupación fue la responsable directa de los hechos.
3. ¿Qué dice el gobierno chino?
Las autoridades chinas siempre han llamado la atención sobre un grupo en particular como responsable de los ataques separatistas: el Movimiento Islámico de Turquestán del Este (ETIM, por sus siglas en inglés).
Para el gobierno de Pekín, el ETIM ha inspirado a varios miembros de la etnia uigur para realizar los actos violentos recientes.
Es cierto que el ETIM, en numerosas ocasiones, ha expresado su deseo de establecer un estado independiente en China. El Departamento de Estado de EE.UU. lo ha descrito como “el mayor grupo combativo de la etnia de los uigures”.
Sin embargo, se desconoce el alcance del ETIM y, además, muchos analistas coinciden en que es muy difícil que la agrupación tenga la capacidad de realizar actos extremistas tan serios.
Hasta ahora este movimiento no ha rechazado ni aceptado ninguna relación con los sucesos recientes.
Las autoridades chinas dijeron que el Partido Islámico de Turquestán -que ha sido señalado como miembro del ETIM- emitió un video en el que admitía la autoría del ataque con cuchillos en Kunming.
Pero lo que está claro es que, tras el atentado del jueves, habrá más presión para que las autoridades chinas respondan en el corto plazo a la pregunta sobre quién estuvo detrás de ese hecho.