La Navidad está llegando anticipadamente para Stanley, quien, a cambio de algo de efectivo, entregó sus viejos revólveres y varios cargadores de fusiles a la policía de la violenta ciudad estadounidense de Baltimore.
“Espero obtener 700 dólares para comprar los regalos de mis tres hijos”, dijo Stanley, rodeado de cuatro armas cortas y cuatro cargadores para fusiles AR-15, un rifle semiautomático frecuentemente usado en los tiroteos masivos que abundan en este país.
El intercambio de armas por efectivo fue propuesto por la policía en un esfuerzo por limpiar de armas ilegales las calles de una ciudad en la que, según el diario Baltimore Sun, 298 personas murieron este año a causa de la violencia armada.
La recolección de armas fue organizada el lunes en un centro deportivo en Upton, un área pobre donde los edificios alicaídos conviven con viviendas públicas y donde al menos ocho personas fallecieron a tiros este año.
La policía prometió mantener el anonimato y no hacer preguntas a aquellos que entreguen sus armas, que deben ser residentes de Baltimore. Ofreció 25 dólares a cambio de los cargadores grandes, 100 por los revólveres, 200 por los rifles semiautomáticos y 500 por los automáticos.
Las transacciones fueron rápidas y en efectivo.
No se robarán ésta
Stanley estaba fascinado con el precio que la policía pagó por los cargadores. “Estaban ofreciendo 25 dólares por cada uno y yo los compré a 5 cada uno”.
Robert, un hombre mayor, llegó con la única arma que tenía: un pequeño rifle calibre 22 en una bolsa de basura. “Unos ladrones entraron a mi casa antes y se robaron una pistola, así que la próxima vez no se robarán ésta”, dijo.
A medida que aumentaba la cantidad de gente que venía a entregar sus armas, un hombre de unos 30 años sacó del baúl de su coche un bolso lleno de fusiles. Parecían estar en buenas condiciones.
El hombre, que pidió no ser identificado, dijo que ya no usaba estas armas que guardaba en su sótano. “No quería venderlas a alguien que no conozco, no quería ser irresponsable. Espero ganar 1.000 dólares, eso pagará mi coche”.
El derecho a portar armas está garantizado por la segunda enmienda de la Constitución y uno de cada tres hogares estadounidenses tiene un arma.
Según autoridades sanitarias, cerca de 40.000 personas murieron en Estados Unidos a causa de armas de fuego en 2017, incluyendo suicidios. La policía de Baltimore informó que en 2012 recogió 250 armas en un esfuerzo similar.
“Al final de cuentas, las armas matan gente y queremos sacarlas de las calles”, dijo la semana pasada el comisionado interino de la policía de Baltimore, Gary Tuggle.
Opiniones divididas
En Upton, las opiniones están divididas. “Es útil, es bueno para la comunidad y significa que habrá menos armas en las calles”, dijo Robert.
Otros son más escépticos. “Esto no va a cambiar nada. O sea, los criminales no van a venir aquí y entregar sus armas”, dijo un joven que no quiso identificarse.
Stanley compartió esa opinión. “No veo pandilleros aquí (...). Las únicas armas que la policía va a obtener son las de los ciudadanos que cumplen las leyes, como yo, y quieren un poco de dinero extra (...) Todo este programa es una pérdida de dinero. No hace nada para atacar el crimen”.
Para reducir el crimen, según él, las autoridades deberían enfocarse en problemas subyacentes. “Los líderes y los políticos aquí (...) deberían enfocarse en el desarrollo económico, la educación y la aplicación de la ley”, agregó.
No obstante, la policía dijo el lunes que la operación había sido un éxito, con 580 armas entregadas nada más que el primer día.
Fuente: AFP