“Solo recuerdo que me volví loco, todo es por mi papá, que me quitó mi iPod y mis cosas”. Ese fue el estremecedor testimonio de Vincent Parker, un joven de 16 años que asesinó a sus padres brutalmente en la localidad de Norfolk, Virginia, en Estados Unidos.
Parker, un estudiante del cuadro de honor de la Norview High School in Norfolk, confesó haber asesinado a sus padres Carol (57) y Wayne (55) debido a los castigos que había recibido.
El joven reveló las circunstancias que rodearon al crimen luego de que se encontrara su ADN en un bate de béisbol, una palanca y cuchillos con los que se le dio muerte, informó el Huffington Post.
El asesino roció gas pimienta sobre su madre para luego apuñalarla en el ojo y golpearla con el bate y la palanca, armas que usó también para dar muerte a su progenitor.
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