El incendiario discurso de Donald Trump al inició de su campaña para alcanzar la candidatura presidencial del Partido Republicano de Estados Unidos, en junio del 2015, llevó a varias empresas a optar por dejar de hacer negocios con el magnate.Seguir a @Mundo_ECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Las compañías no querían verse vinculadas con sus controversiales propuestas, como la de deportar a millones de extranjeros indocumentados o prohibir la entrada de musulmanes a Estados Unidos.
Paradójicamente, en los últimos tiempos los negocios de Donald Trump no parecen haber hecho otra cosa que prosperar.
Los ingresos de las empresas del magnate de los bienes raíces se incrementaron en US$190 millones desde enero del 2015 hasta la fecha.
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Los campos de golf son una buena fuente de ingresos para Trump. (Foto: Getty Images)
Estimaciones propias
La información aparece registrada en un reporte financiero de 104 páginas que entregó Donald Trump a la Comisión Federal Electoral (CFE).
Aunque resulta difícil determinar en qué medida la proyección que le ha dado la campaña electoral ha favorecido los negocios de Donald Trump, hay algún dato que hace pensar que tienen relación.
En el Trump National Golf Club, ubicado en Florida, donde el magnate usó su discurso con motivo de la victoria obtenida en el Supermartes para promover sus carnes y otros productos, los ingresos aumentaron de US$12 millones a US$18 millones, según reseñó The Washington Post.
Su libro más reciente, Crippled America (Estados Unidos paralítico), generó entre US$1 millón y US$5 millones en regalías, según informó Donald Trump.
Los ingresos de su resort Mar-a-Lago en Florida casi se duplicaron desde US$16 millones hasta US$30 millones desde que el magnate inició su carrera hacia la Casa Blanca.
Incluso su marca de agua embotellada, Trump Ice, ha aumentado sus ganancias .
Las finanzas de Donald Trump también parecen haberse beneficiado de la venta del concurso de Miss Universo, una decisión provocada por su ingreso en la arena política.
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El resort Mar-a-Lago en Florida casi logró duplicar sus ingresos, según el informe financiero. (Foto: Getty Images)
Según ese informe, Donald Trump tiene activos por, al menos, unos US$1.500 millones e ingresos en torno a unos US$615 millones. La mayor parte procede de los derechos de autor por sus libros y de sus campos de golf.
El magnate reportó ingresos por US$49 millones derivados de la venta de su participación en el concurso, después de referirse como “violadores” y “criminales” a los inmigrantes mexicanos durante el lanzamiento de su campaña en junio.
El concurso había sido valorado entre US$5 y US$25 millones en un informe financiero previo.
Declaraciones de impuestos
Donald Trump ha dicho que su fortuna equivale a US$10.000 millones. Esa cifra, sin embargo, ha sido cuestionada.
La revista Forbes y el servicio de noticias financieras Bloomberg estiman que el magnate posee en torno a US$4.000 millones.
Según reseñó The New York Times, el formato en el que fue elaborado el reporte financiero entregado a la CFE no facilita la tarea de estimar su fortuna.
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Trump ha bautizado numerosos productos con su apellido, incluyendo vinos, carne y agua embotellada. (Foto: Reuters)
Hasta ahora, Donald Trump ha rechazado las peticiones para que haga públicas sus declaraciones de impuestos, una práctica usual entre los candidatos presidenciales desde inicios de la década de 1970.
Sus críticos, incluyendo al ex candidato presidencial republicano Mitt Romney, dicen que las declaraciones de impuestos de Donald Trump darían una imagen más adecuada de sus finanzas y de sus actividades caritativas.
El magnate ha dicho que sus abogados le han aconsejado no divulgar esa información mientras esté siendo auditado.
El Servicio de Impuestos Internos de Estados Unidos (IRS, por sus siglas en inglés) ha dicho que no hay ninguna prohibición que impida a los individuos que están siendo auditados hacer públicas sus declaraciones fiscales.
Pero Donald Trump prefiere callar. ¿Por cuánto tiempo?
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