Washington, DPA
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos anunció hoy que han detenido a 192 'coyotes' en el valle de Río Grande (Texas) en una operación contra el tráfico de personas en la frontera entre México y Estados Unidos.
La llamada Operación Coyote, de 90 días de duración, comenzó el pasado 23 de junio y todavía no está cerrada.
Como resultado de esta operación, las autoridades estadounidenses detuvieron a 192 'coyotes' (traficantes de personas) y arrestaron a 501 inmigrantes indocumentados que habían entrado ilegalmente en el país.
También se incautaron de cuatro armas y 28 vehículos y congelaron 288 cuentas bancarias por valor de 625.000 dólares, dinero presuntamente procedente del tráfico de personas y de droga, anunció el secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, en rueda de prensa.
Las autoridades estadounidenses explicaron que los inmigrantes centroamericanos pagan entre 5.000 y 10.000 dólares por persona a los 'coyotes' para entrar ilegalmente en Estados Unidos.
Con esta Operación Coyote, el Gobierno Estadounidense pretende mandar un mensaje claro: “Nuestra frontera no está abierta a la inmigración ilegal. A aquellos que vengan ilegalmente de Centroamérica, les deportaremos”, advirtió Johnson, quien aseguró que están redoblando sus esfuerzos para luchar de forma más eficaz contra los 'coyotes'.
El secretario de Seguridad Nacional anunció que en el caso de adultos indocumentados se ha reducido el tiempo de repatriación de 33 a 4 días. Y que ahora se están enviado entre 6 y 10 vuelos semanales con adultos que han sido deportados a sus países de origen.
Johnson también explicó que las autoridades estadounidenses están construyendo más centros de detención para albergar a los adultos que viajan con niños.
En cuanto a los niños indocumentados no acompañados que cruzan la frontera, Johnson reiteró que “no hay permisos” y que la mayoría de ellos serán deportados a su país de origen.
Johnson se mostró satisfecho porque en las dos primeras semanas de julio se redujo el número de niños indocumentados no acompañados que son detenidos por la patrulla fronteriza a más de la mitad con respeto al mes anterior.
Según los datos preliminares, en las dos primeras semanas de julio la patrulla fronteriza detuvo en el valle de Río Grande una media de 150 niños no acompañados por día, muy por debajo de las cifras de junio, cuando detenían una media de 355 menores solos por día, anunció ayer la Casa Blanca.
Aunque “los números están cayendo”, Johnson no quiso “cantar victoria” y reconoció que este descenso puede ser “estacional”, ya que muchos inmigrantes evitan cruzar el desierto en verano (boreal) por las altas temperaturas.