Varios medios de Estados Unidos identificaron al maquinista del tren que descarriló en Filadelfia, que provocó la muerte de 7 personas y dejó a más de 200 personas heridas, como Brandon Bostian, de 32 años y quien ha trabajado para el operador ferroviario Amtrak desde 2009.Seguir a @Mundo_ECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Las cadenas NBC y CNN indicaron que Bostian abandonó el miércoles el hospital Einstein Medical Center de Filadelfia, donde fue ingresado tras sufrir heridas en el accidente, y fue trasladado a una comisaría para ser interrogado por la Policía.
El maquinista dejó las dependencias policiales acompañado por un abogado.
En su página de Facebook, que desde ayer tiene un fondo negro como foto de perfil y donde recibe mensajes de apoyo de sus conocidos, dice que Bostian vive en Nueva York y es originario de Memphis, Tenessee.
De acuerdo con la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), que investiga el accidente, el tren iba a una velocidad superior a los 160 kilómetros por hora, el doble de la permitida en un tramo previo a una curva, antes de descarrilar en la noche del martes.
Según la NTSB, Bostian activó los frenos de emergencia “justo unos momentos antes” de que el tren descarrilase.
Las autoridades recuperaron la caja negra del tren, que deberá ayudar a esclarecer qué fue exactamente lo que sucedió en la locomotora antes de que se produjera el descarrilamiento.
El alcalde de Filadelfia, Michael Nutter, dijo que los más de 160 kilómetros por hora a los que circulaba el tren en el momento del accidente eran una velocidad “como mínimo, irresponsable”.
Por su parte, el gobernador de Pensilvania (estado en el que se encuentra Filadelfia), Tom Wolf, también se refirió a la actuación del maquinista, pero evitó juzgarlo y consideró que “necesitamos saber mucho más acerca de lo que ocurrió”.
Siete de los vagones del tren regional de Amtrak número 188, que cubría la ruta entre Washington y Nueva York, descarrilaron en la zona de Port Richmond de Filadelfia.
El tren llevaba 238 pasajeros y 5 empleados, y en el accidente murieron 7 personas. La última víctima de la que se ha informado fue hallada esta mañana en el lugar del descarrilamiento, de acuerdo con el Departamento de Bomberos de Filadelfia.
Más de 200 personas tuvieron que recibir tratamiento médico en hospitales cercanos tras el accidente y aproximadamente la mitad ya han recibido el alta.
El siniestro ha ocurrido en el corredor ferroviario con mayor volumen de pasajeros del país y ha sacado a la luz las deficiencias en su infraestructura, con muchos túneles y vías viejas, y en el servicio de Amtrak.
Fuente: Agencias