Nueva York (Reuters)
El Consejo de la Ciudad de Nueva York votó el jueves a favor de crear el mayor programa municipal de tarjetas de identificación del país que incluirá a inmigrantes ilegales.
El plan, aprobado por 43 votos a favor, 3 en contra y dos abstenciones, permitirá que unos 500.000 indocumentados en la ciudad abran cuentas bancarias, firmen alquileres de departamentos y accedan a otros servicios donde se necesita de una identificación con fotografía.
Los partidarios de la ley, que incluyen al alcalde Bill de Blasio, dijeron que las tarjetas reducirán los obstáculos para los ciudadanos mayores de edad, personas sin techo e inmigrantes ilegales.
“Nosotros protegeremos a los cerca de medio millón de neoyorquinos indocumentados, cuyas voces frecuentemente no son escuchadas simplemente porque no tienen identificación”, dijo en febrero pasado De Blasio en su primer discurso sobre el estado de la ciudad.
El proyecto de ley suma a Nueva York a una lista de ciudades de Estados Unidos con una gran población de inmigrantes que han creado programas de tarjetas de identidad municipales, como Los Angeles, San Francisco, Nuevo Haven y Connecticut.
El programa de tarjetas de identificación será el más grande del país. La tarjeta incluirá una fotografía de su dueño, nombre, fecha de nacimiento y dirección. También tendrá fecha de vencimiento.
Los postulantes podrán obtener la tarjeta utilizando un certificado de nacimiento extranjero, una licencia de conducir o una prueba de residencia como una cuenta de un servicio básico. También tendrá la opción de incluir un género que decidirá el postulante.
Contra la medida votaron los tres miembros republicanos del consejo de la ciudad, quienes dijeron que el costo de 8 millones de dólares podría ser mejor invertido en otras prioridades, como contratar bomberos y agentes de policía.
La votación sobre la tarjeta de identidad de la Ciudad de Nueva York se da en medio de un debate nacional sobre cómo abordar la situación de millones de inmigrantes ilegales e indocumentados que viven en Estados Unidos, y un aumento en los cruces fronterizos de menores que viajan sin acompañantes, provenientes principalmente desde América Central.