La Infanta Cristina de Borbón continúa en el ojo de la tormenta por las imputaciones de lavado de dinero y fraude fiscal que la justicia española dio contra ella el martes. Hoy, su abogado anunció que la hija de los reyes de España no apelará las acusaciones y comparecerá voluntariamente.
No obstante, la defensa reiteró la inocencia de la infanta y aseguró que su decisión de comparecer se debe a su deseo de no prolongar el proceso.
La convocatoria de los jueces no tiene “fundamento jurídico”, dijo en un comunicado el despacho de la defensa, Roca Junyent, que afirmó que Cristina de Borbón no tiene nada que ocultar al juez ni al conjunto de la sociedad española.
La Infanta “ha decidido renunciar al derecho al recurso (de apelación) y comparecer voluntariamente ante el juez en la fecha que se señale”, agregó el documento.
El juez José Castro, quien imputó a la infanta, convocó la primera comparecencia para el 8 de marzo.
La infanta y su marido, ya imputado, Iñaki Urdangarin, son propietarios de la sociedad Aizoon, de la que la justicia sospecha que se usó de pantalla para desviar fondos públicos desde el Instituto Nóos.
El viernes, el abogado de Cristina afirmó que ella actuó por amor.
RESPALDO DE LA CASA REAL
Tras la decisión de la infanta de no apelar, la Casa Real española valoró positivamente el anuncio y mostró conformidad con que declare ante el juez.
Unas semanas atrás, la Casa Real calificó como un “martirio” el escándalo relacionado con el llamado caso Nóos, que se remonta a tres años atrás, y que la llevó a mudarse a Suiza hace seis meses.
Durante este tiempo la monarquía española ha sufrido una de sus más graves crisis de imagen.