La infanta Cristina de Borbón abandonó esta tarde el juzgado de Palma de Mallorca en el que declaró durante seis horas como imputada en el caso de corrupción que hace temblar a la monarquía española.
“Hasta luego. Gracias”. Esas fueron las únicas palabras que pronunció ante los numerosos periodistas que aguardaban su salida.
Sus abogados fueron más explícitos poco después, mostrándose “muy contentos” con la declaración de la infanta, a la que el juez atribuye un posible delito de fraude fiscal y otro de blanqueo de dinero. “Ha explicado todo”, dijeron.La infanta respondió a las preguntas del juez José Castro, que instruye el caso de corrupción en el que su esposo, Iñaki Urdangarin, es el protagonista. El escándalo la implicó y el magistrado la acusó formalmente el pasado 7 de enero.Tras un receso de casi dos horas para comer, la infanta Cristina contestó a las preguntas de la fiscalía, de la abogacía del Estado y de su propia defensa, pero no a las de las acusaciones populares.“Es una satisfacción decir que la justicia funciona. Todos somos iguales ante la ley”, dijo el abogado de la infanta Miquel Roca, uno de los padres de la Constitución española y amigo del rey Juan Carlos.Roca rechazó que la infanta se mostrara evasiva -como señalaron las acusaciones particulares durante la tarde- ante el juez Castro. “Ha hecho una declaración muy sincera, muy leal”, aseguró el abogado.El propio juez salió poco después y, en unas breves declaraciones ante la prensa, explicó que no hará “ninguna valoración”. “Cuando llegue el momento de tomar un decisión lo sabrán”, dijo. Preguntado por los periodistas sobre si hoy había sido un buen día para la Justicia, respondió: “Ustedes decidirán”.La toma de declaración de la infanta Cristina es una de las últimas diligencias que practica el juez Castro en el caso, en el que acusa a Urdangarin de haberse apropiado de casi seis millones de euros de dinero público al frente del Instituto Nóos, una organización en teoría sin ánimo de lucro.El juez tiene ahora que decidir si abre o no juicio oral contra Urdangarin, y también si lo hace contra la infanta.