Expertos demolieron los restos del puente Morandi en la ciudad italiana de Génova (Italia) casi un año después de que colapsara parcialmente.
Miles de personas fueron evacuadas antes de la explosión controlada que se hizo para derribar dos grandes torres de acero y concreto de cerca de 4.500 toneladas.
43 personas murieron cuando una parte de la estructura se desplomó en agosto del año pasado, provocando la caída al vacío de autos y camiones.