Roma. Un barco de rescate privado con 629 migrantes a bordo permanecía en el mar el domingo en la noche tras más de un día de no recibir autorización para atracar en Italia ni en la isla de Malta.
El grupo de asistencia SOS Mediterranean indicó que entre los pasajeros de su buque, el Aquarius, hay 400 migrantes rescatados por la armada italiana, la guardia costera de ese país y barcos cargueros privados que posteriormente los transfirieron de embarcación. Además, la tripulación del barco activista recogió el sábado en la noche a 229 migrantes de las aguas o de frágiles embarcaciones de traficantes de personas, incluidos 123 menores que viajaban solos y siete mujeres embarazadas.
El Aquarius y sus pasajeros quedaron entrampados en la campaña de medidas enérgicas promovida por el socio derechista del nuevo gobierno populista de Italia, que se ha comprometido a impedir que el país se convierta en el “campamento de refugiados de Europa”. El primer ministro italiano Giuseppe Conte dijo que personalmente contactó al primer ministro de Malta, Joseph Muscat, para “expresamente pedirle que por lo menos asumiera la asistencia humanitaria a las personas en dificultades a bordo del Aquarius”.
Pero Muscat, “aunque comprensivo de la situación”, rechazó la solicitud, dijo el domingo Conte en su cuenta de Facebook. Esa postura “confirma la más reciente renuencia de Malta, y por ende, de Europa, para intervenir y atender la emergencia”. Al igual que Malta, Italia no parecía ceder.
Matteo Salvini, el ministro italiano del Interior que dirige el partido antiinmigrante Liga en la coalición de gobierno, desde hace tiempo ha arremetido contra lo que considera es la falta de solidaridad de Europa con Italia durante las crisis migratorias de los últimos años. “A partir de hoy, Italia, también, comienza a decir no al tráfico de seres humanos, no al negocio de la inmigración clandestina”, tuiteó Salvini el domingo.
Después de encabezar el domingo una reunión de varias horas con los dirigentes de su coalición en la oficina del primer ministro, Conte dijo que Italia envió dos lanchas de motor con personal médico por si los migrantes necesitan ayuda, pero no mencionó de qué forma podría el Aquarius ingresar a algún puerto. Salvini y el ministro italiano de Transporte, Danilo Toninelli, que pertenece a la facción Movimiento 5 Estrellas en el nuevo gobierno, afirmaron el domingo en un comunicado conjunto que es responsabilidad de Malta “abrir sus puertos a centenares de rescatados en el barco Aquarius perteneciente a una organización no gubernamental”.
“La isla no puede continuar eludiendo la situación”, dijeron los ministros. “El Mediterráneo es mar de todos los países que tienen costas en él, y (Malta) no debe pensar que Italia continuará enfrentando sola este fenómeno gigantesco”. Horas antes, Malta indicó en un comunicado que el Aquarius recogió a los migrantes en aguas controladas por Libia y en las que las autoridades italianas en Roma coordinan operaciones de búsqueda y rescate.
El Centro Maltés de Coordinación de Rescate “no es la autoridad competente ni la de coordinación”, según el comunicado. Mathilde Auvillain, portavoz de SOS Mediterranean, dijo a The Associated Press que el barco se “dirige hacia el norte por instrucciones recibidas después de los rescates y transferencias” del sábado en la noche. El centro de coordinación de rescate con sede en Roma dio las instrucciones.
En un comunicado, el grupo de asistencia indicó que había “captado bien” la posición de Salvini, como lo habían informado antes medios italianos. El Aquarius “todavía aguarda instrucciones definitivas relacionadas al puerto donde atracar”. Más hacia el oeste en el Mediterráneo, las autoridades españolas rescataron a 334 migrantes y recuperaron cuatro cuerpos en botes que interceptaron cuando intentaban llegar a Europa el fin de semana.
Un patrullero del servicio de Salvamento Marítimo interceptó nueve embarcaciones precarias con inmigrantes que zarparon de la costa africana a lo largo del sábado y el domingo temprano. En una embarcación encontrada el domingo había cuatro cadáveres y otros 49 inmigrantes. El servicio de rescate dijo que aún falta determinar la causa de su deceso.
Hacia el este, la guardia costera libia interceptó a 152 inmigrantes, incluidos niños y mujeres, a bordo de dos embarcaciones detenidas el sábado después de que zarparon en el Mediterráneo. Los inmigrantes fueron llevados a una base naval en Trípoli.Fuente: AP