Praga. Las autoridades eslovacas han identificado hoy al autor material y a la persona que encargó el asesinato, el pasado febrero, del periodista de investigación Jan Kuciak, y han afirmado que al presunto asesino se le ofrecieron 70.000 euros y que la muerte de la novia del reportero no formaba parte del plan.
“Quién encargó el crimen pagó por el asesinato de Kuciak al menos 70.000 euros”, dijo el fiscal que investiga el crimen, en una rueda de prensa televisada.
La policía y la Fiscalía identificaron hoy al supuesto asesino como Tomás Sz., mientras que quien encargó el crimen fue la empresaria Alena Zs.
Algunos medios eslovacos han informado de que esa empresaria tenía relación con compañías italianas que actuaban en Eslovaquia como fachada de la Ndrangheta, la mafia calabresa.
Según el diario “Dennik N”, Alena Zs., de 44 años, trabajaba como traductora de italiano para el polémico hombre de negocios eslovaco Marian Kocner, cuyas actividades fueron objeto de las investigaciones periodísticas de Jan Kuciak.
En el último reportaje de Kuciak, publicado ya tras su muerte, se exponía una compleja red eslovaca de la Ndrangheta, con vínculos que llegaban hasta dos asesores del entonces primer ministro, Robert Fico.
Además de los supuestos autores material e intelectual del crimen, otras dos personas fueron detenidos entre el jueves y el viernes de la semana pasada.
Una de los cuatro arrestados, Zoltán A., está colaborando con la policía, aseguró la Fiscalía.
“Alena Zs. ordenó el asesinato, Tomas Sz. los mató a disparos, Miroslav M. fue el chofer y Zoltan A., un intermediario”, dijo el fiscal en una conferencia de prensa en Bratislava.
Según las autoridades, el arma homicida fue localizada en casa del presunto autor del asesinato.
La Fiscalía precisó que se sabe cuándo la empresaria empezó a tratar este encargo y cómo se pagó el importe, e incluso que quedó un saldo pendiente de 20.000 euros que el ejecutor del crimen acordó que figurara como deuda a su favor.
Según los datos de que disponen las autoridades, la novia de Kuciak, Martina Kusnirova, no era uno de los objetivos de los criminales y “solo se encontraba en el lugar equivocado en el momento equivocado”, dijo el fiscal general, Jaromir Ciznar.
El doble asesinato desató una ola de protestas ciudadanas en Eslovaquia, hasta el punto de provocar la dimisión de Fico y de su ministro del Interior, Robert Kalinak.
Fuente: EFE / AFP