El primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras, llegará hoy a Alemania y será recibido con honores militares por la canciller, Angela Merkel.
Una hora y cuarto después del encuentro se realizará una conferencia de prensa entre ambos. Tras la escalada de acusaciones de las últimas semanas entre los dos países en torno a las reformas que exige Merkel y la flexibilización de las condiciones del rescate que reclama Tsipras, los dos dirigentes quieren rebajar la tensión con su encuentro en persona.
Antes del viaje se conocieron en Atenas más detalles sobre la lista de reformas que el gobierno griego se comprometió a presentar a sus acreedores. Según lo trascendido, la coalición quiere llenar las arcas estatales con una mezcla de aumento de impuestos, privatizaciones y recuperación de dinero de evasores fiscales.
Además, según señalaron fuentes del gobierno a DPA, hará falta llegar a los 67 años para jubilarse. Con 62 años sólo será posible si la persona tiene al menos 40 años de aportes.
El fisco llamará a todos los griegos que han girado dinero negro al extranjero a regularizar su situación. “Sabemos quiénes son, y les daremos una última oportunidad de salvarse”, señaló un alto funcionario del Ministerio de Finanzas a condición de anonimato.
En Atenas hay una lista con el nombre de miles de griegos que en los últimos años transfirieron más de 100.000 euros al extranjero. Según el Ministerio de Finanzas, cerca de 3,7 millones de griegos y 447.000 empresas deben al Estado cerca de 76.000 millones de euros.
Por otra parte, el Ejecutivo prevé aumentar el IVA en las islas turísticas del Egeo, como por ejemplo en Míkonos y Santorini. También subirá el IVA para los hoteles, para el tabaco y el alcohol.
Tsipras pretende presentar a Merkel hoy a grandes rasgos estas ideas y mostrar su decisión de enfrentarse a los grupos que llevan décadas evadiendo impuestos en Grecia y practicando una política de nepotismo.
En la lista trabajaron de manera conjunta el ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, y el el viceprimer ministro, Yannis Dragasakis, durante todo el fin de semana. Sin embargo, el documento no está completamente terminado.
Los acreedores internacionales impusieron como condición para liberar los pagos pendientes del paquete de rescate financiero, que ascienden a 7.200 millones de euros, la implementación de reformas concretas.
Junto con los problemas de liquidez, Tsipras acude a Berlín con la reavivación de las exigencias griegas de obtener reparaciones de guerra. El gobierno alemán ve este capítulo completamente cerrado.
El ministro de Exteriores griego, Nikos Kotzias, propuso crear “un consejo de sabios” con expertos de los dos países para poder solucionar el conflicto, algo que fue rechazado por Berlín.
“Creo que se debe encontrar el camino para discutir con Alemania de manera racional sobre determinados problemas”, afirmó en declaraciones publicadas hoy en el diario alemán “Süddeutsche Zeitung”.
Kotzias acordó con su homólogo alemán, Frank-Walter Steinmeier, ayer en Berlín “evaluar de modo conjunto el estado de las relaciones bilaterales entre Alemania y Grecia y mantener conversaciones sobre su ulterior desarrollo para el futuro”.
Tsipras aterrizará en la parte militar del aeropuerto Tegel de Berlín, donde será recibido por una delegación de honor alemana. De allí se dirigirá a la Cancillería. Después del encuentro hay prevista una cena entre los dos mandatarios.
Tsipras regresará el martes a Atenas después de reunirse con los líderes del partido político alemán de La Izquierda, Gregor Gysi y Katja Kipping.
Fuente: Atenas (DPA)