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Argentina. Emanuel García tenía 32 años y trabajaba como camillero en el hospital El Palomar. Lo último que escucharon de él fue “Espera, yo subo” ante la alarma de que había alguien el techo que quería matarse.
García corrió por las escaleras y llegó a tiempo para intentar persuadir al paciente psiquiátrico que amenazaba con suicidarse, que respondía al nombre de Ariel Morisse (37).
“El hombre estaba mal, desesperado, por lo que se llamó a los que se encontraban en guardia en el departamento de psiquiatría y lo derivaron, pero al anunciarle que tenía que inyectarlo para sedarlo, escapó despavorido y gritando que se mataría”, relató al diario Clarín, Carlos Sboro, un médico de turno.
Es entonces que Emanuel García llegó a la azotea e intentó cogerle la mano para contenerlo, pero el resultado fue trágico porque no lo logró. Ambos cayeron desde un séptimo piso y murieron.
Los trabajadores del Hospital hoy se encuentran en duelo y han convocado a una protesta por la falta de seguridad. Este es el segundo suicidio en menos de dos meses. Ellos han dado paso a un paro indefinido e impidieron la entrada de Donato Spaccavento, el director de las instalaciones.
Los médicos cargaron pancartas que decían “A nuestro compañero Emanuel lo mató la desidia”.
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