Un inédito proyecto de ley para despenalizar el autocultivo de marihuana para fines recreativos y medicinales en Chile dio un paso significativo este lunes tras ser aprobado en la comisión de Salud de la Cámara de Diputados.
El proyecto ahora debe ser votado en la sala y luego pasar a su trámite en el Senado.
“El criterio de la comisión no es permitir el consumo discriminado de marihuana (...) se trata solo de permitir en condiciones medicinales prescritas por un médico y en condiciones de un autocultivo con límite máximo acotado de seis plantas”, dijo Luis Castro, diputado socialista y presidente de la Comisión de Salud.
Los autocultivadores deberán ser mayores de 18 años, pero en caso de pacientes se podrá suministrar marihuana a menores de edad con previa receta médica.
El proyecto mantiene la prohibición del consumo en la vía pública y prevé un porte máximo de 10 gramos por persona.
“Nunca y en ningún caso se permitirá fumar marihuana en la vía pública o en lugares públicos abiertos”, agregó el legislador.
Castro recriminó al gobierno de Michelle Bachelet por, según él, “haber desatendido y despreocupado este proyecto de ley que hoy sale de la comisión de salud exitosamente”.
“Hay una deuda pendiente porque la autoridad del ejecutivo no ha dado la cara”, añadió.
En Chile, la marihuana figura en la normativa como una droga dura. Se permite su consumo en lugares privados, pero su venta y autocultivo están penados.
Si se aprueba la ley, la marihuana pasará a la lista de drogas blandas como el alcohol.
En paralelo, para este martes está prevista la primera cosecha legal de marihuana en Chile para fines medicinales, establecida en base a un permiso especial de las autoridades para este único caso que lleva adelante el municipio de La Florida, en Santiago.
El proyecto de ley en Chile -que inicia ahora un intrincado camino que podría llevar años de debate- llega en momentos en que la región avanza en la legalización de la droga.
Estados Unidos legalizó en varios estados la marihuana con fines medicinales, mientras que Uruguay pateó el tablero al aprobar a fines de 2013 una ley que regula el mercado de marihuana, lo que permitirá su autocultivo o venta en farmacias para consumo recreativo.