América Latina y El Caribe tendrán un año favorable en términos económicos, aunque su desempeño estará condicionado por el desempeño en China y Estados Unidos.
Esa conclusión se desprende de las nuevas perspectivas económicas mundiales, que presentó el Banco Mundial este martes en la noche, según explica el corresponsal de BBC Mundo en Washington, Thomas Sparrow.
Según la organización internacional con sede en Washington, Estados Unidos, la perspectiva regional es positiva y habrá un mayor crecimiento en las exportaciones, pero también habrá dos riesgos particulares.
El primero es si se produce “una desaceleración más aguda de la esperada en China”, lo que podría provocar una caída más prolongada y grave en los precios de los bienes primarios. Esto podría afectar, entre otros aspectos, a las exportaciones regionales.
El segundo riesgo está relacionado con el sostenido retiro de la política de flexibilización cuantitativa en Estados Unidos, así como el alza gradual de las tasas de interés. La política es, en esencia, una medida utilizada por la Reserva Federal para revivir el gasto y el crecimiento económico.
El Banco Mundial considera que si bien el mercado ha reaccionado con calma ante el inicio de la reducción, un cambio en esa reacción podría provocar el aumento en las tasas de interés. Esto podría terminar afectando las políticas monetarias y las perspectivas de crecimiento en la región.
“Un crecimiento inferior de lo esperado en las economías de ingresos altos podría afectar las perspectivas de expansión de América Latina y el Caribe”, resalta el informe.FORTALECIMIENTO SOSTENIDO
En particular, el Banco Mundial estima que el crecimiento de la región tendrá un sostenido fortalecimiento de 2,9% en 2014 a 3,7% en 2016. Las exportaciones también aumentarán en el mismo periodo de 4,0% en 2014 a 5,4% en 2016.
El panorama positivo que resalta el Banco Mundial contrasta con lo que ocurrió en la región en la 2013, pues el crecimiento se vio restringido por la situación poco favorable del comercio internacional y del mercado de los productos básicos.
Además, la demanda interna también fue débil en 2013 y se redujo el aumento del consumo privado y gubernamental.
En sus previsiones más generales, el Banco Mundial proyecta que la economía mundial se fortalecerá en 2014 gracias al repunte de los países en desarrollo y a que las economías de ingresos altos parecen estar superando las dificultades causadas por la crisis financiera internacional.
Según las proyecciones, el crecimiento global pasará de 2,4% en 2013 a 3,2% este año, para luego estabilizarse en los años siguientes.
El presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, explicó en ese sentido que el desempeño de las economías avanzadas está cobrando impulso y que esto, a su vez, debería apoyar el crecimiento de las naciones en desarrollo en los próximos meses.
Éstas últimas pasarán de un crecimiento de 4,8% en 2013 a 5,3% en 2014 y 5,7% en 2016, lo que es inferior al nivel que tenían antes de la crisis. Sin embargo, el Banco Mundial estima que ese ritmo menor no es motivo de preocupación, pues no se debe al potencial de crecimiento de los países.
Por su parte, las naciones de ingresos altos tendrán un crecimiento menor, aunque también en alza. La economía de Estados Unidos se ampliará en 2,8% este año, en comparación con 1,8% en 2013. El crecimiento en la zona euro está previsto en 1,1% tras dos años de contracción.
Y en China, el Banco Mundial espera que sea del 7,7%, un crecimiento “fuerte y sostenido” que ayuda a “consolidar los avances en los países en desarrollo”.