Caracas (DPA). El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, saludó hoy la posición del gobierno de Washington de descartar por el momento la aplicación de sanciones contra funcionarios venezolanos, que están siendo debatidas en el Congreso de Estados Unidos.
“Saludo la posición del gobierno de Estados Unidos”, dijo en un acto oficial en la casa de gobierno en el que aplaudió las declaraciones de la secretaria de Estado adjunta para el Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, quien dijo que no es el momento de aplicar sanciones contra Venezuela.
“Llamamos a la sensatez”, agregó.
El jueves el gobierno estadounidense descartó la aplicación inminente de sanciones contra funcionarios del gobierno venezolano, pese a los esfuerzos en este sentido del Congreso norteamericano.
“No es el momento de aplicar sanciones contra Venezuela”, afirmó Jacobson, un día después de que la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobara un proyecto de ley que contempla sancionar a funcionarios venezolanos implicados en la represión de las protestas que empezaron en febrero.
Maduro anunció que el embajador que designó en un intento por normalizar las relaciones con Estados Unidos, Maximiliam Arveláez, irá ahora como encargado de negocios en Washington.
“He decidido que vaya como encargado de negocios para que abra caminos, con el Congreso, con la sociedad norteamericana, de respeto y ojalá más delante de cooperación”, señaló.
Maduro señaló que su gobierno rechaza la política de sanciones, pues en este caso “tendríamos que defendernos”.
Asimismo, no descartó que en caso de que se apliquen sanciones contra funcionarios acusados de violar derechos humanos durante las protestas lleguen a un punto extremo “de no tener embajada ni consulados” en Estados Unidos.
CONTRA MACHADOIgualmente, Maduro dijo que apoyaba todas las acciones judiciales contra la diputada opositora María Corina Machado, quien fue acusada por el oficialismo de formar parte de un complot para asesinar al presidente.
Según el presidente, las denuncias contra Machado y otros dirigentes opositores respecto a un supuesto magnicidio y un golpe de Estado son “la punta del iceberg”.
“Esto apenas comienza. Esto es parte de la locura, (Machado) está obsesionada con el poder y está involucrada (en el complot). Apoyo los actos de justicia porque estas denuncias deben tomarse en cuenta por la justicia”, alegó.