Salvador Sánchez Cerén se convierte este domingo en el primer excomandante guerrillero en llegar a la presidencia de El Salvador.
El político y maestro de escuela de 69 años, hasta hoy vicepresidente de Mauricio Funes, estará al frente del segundo período consecutivo del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que llegó al poder en 2009.
En su último programa radial “Conversando con el Presidente”, Funes dijo cerrar su mandato satisfecho de que su gobierno “comenzó a transformar El Salvador” y añadió que su administración “reconoció a los más pobres como sujetos de derecho”.
El ahora expresidente salvadoreño suspendió la cena que iba a ofrecer este sábado a los mandatarios invitados a la ceremonia de posesión debido a la muerte de su madre, Mirna Cartagena de Funes, quien falleció debido a un paro respiratorio.
En la investidura oficial, participarán las delegaciones oficiales de 105 países. Desde el viernes comenzaron a llegar al país jefes de Estado, mandatarios y políticos de todas partes del mundo como el príncipe de Asturias, Felipe de Borbón; el primer ministro de Taiwán, Jiang Yi-Hua; la primera vicepresidenta de la República del Perú, Marisol Espinoza; el vicepresidente del Consejo de Estado de Cuba, Salvador Antonio Valdés Mesa; y el vicepresidente de Argentina, Amado Boudou.
Luego del acto oficial, el FMLN realizará por la tarde una fiesta popular en la Plaza Cívica, en el centro de San Salvador, en la que espera que participen “no menos de100.000” militantes y simpatizantes de todo el territorio nacionalTENDENCIA REGIONAL El corresponsal de BBC Mundo en la región, Juan Carlos Pérez, recordó que antes de Sánchez Cerén, dos excomandantes del FMLN habían aspirado a la presidencia en El Salvador: Facundo Guardado en 1999 y Schafick Handal en 2004.
“Ambos perdieron, lo que consolidó la percepción de que las heridas de la guerra civl estaban muy frescas como para elegir a alguien tan directamente involucrado en ella. A eso se sumaba las férreas campañas del partido Arena (derecha), que no dejaban que el pasado de sus enemigos políticos se olvidara”.
En 2009, el FMLN eligió como candidato a la presidencia a Mauricio Funes, un popular periodista ajeno al partido y quien nunca había pertenecido a una organización guerrillera.
“Sin embargo, ahora, exactamente 22 años después del fin de la guerra civil, buena parte de los salvadoreños parecen dispuestos a dejar que las heridas del pasado se cierren”, concluyó Pérez.
Sánchez Cerén se une además a un nuevo fenómeno en América Latina: el de personas que se alzaron en armas contra el Estado y que ahora, gracias a los procesos de paz realizados en la región durante las últimas décadas, llegan al poder por vías democráticas.
Tal es el caso del presidente José Mujica, de Uruguay y del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro.
Y aunque no realizaron acciones armadas, las presidentas de Brasil, Dilma Rousseff, y de Chile, Michelle Bachelet, también estuvieron en la clandestinidad y fueron torturadas.DE LA ENSEÑANZA A LAS ARMASSánchez Cerén nació en 1944 en el municipio de Quezaltepeque, en el oeste del país, en el seno de una numerosa familia (eran 12 hijos), su padre era carpintero y artesano y su madre vendía comida en un mercado.
Estudió educación en San Salvador y -diría años después- conoció la pobreza real en su primera asignación como maestro rural, en el cantón (pueblo) Tilapa en Huizúcar.
Era una época en la que los campesinos no enviaban a sus hijos a la escuela porque, recuerda, “decían que los estudios no dan para comer”.
En 1965, a los 21 años de edad, se integró a la Asociación Nacional de Educadores Salvadoreños 21 de Junio (ANDES). En 1972 se unió a las Fuerzas Populares de Liberación Farabundo Martí, la primera organización alzada en armas de su país, creada en 1970.
Este seria uno de los cinco grupos que, en 1980, se unirían bajo el nombre de Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional organización que condujo una fiera guerra civil contra el gobierno salvadoreño.
La guerra civil -que dejó al menos 75.000 muertos- finalizó en 1992, con los Acuerdos de Paz de Chapultepec, firmados en Ciudad de México.