“Hermanas y hermanos, parto rumbo a México, agradecido por el desprendimiento del gobierno de ese pueblo hermano que nos brindó asilo para cuidar nuestra vida. Me duele abandonar el país por razones políticas, pero siempre estaré pendiente. Pronto volveré con más fuerza y energía”. Este fue el mensaje de Evo Morales, en Twitter, con el que anunció su partida de una Bolivia que ha venido registrando violentos enfrentamientos entre sus seguidores y opositores.
Como se recuerda, Evo Morales renunció a la presidencia de Bolivia tras una serie de protestas que se vienen desarrollando desde el 20 de octubre, fecha en la que se llevaron a cabo las cuestionadas elecciones.
Al respecto, el informe de la Organización de los Estados Americanos (OEA) anunció “irregularidades” en los comicios. Posteriormente, las Fuerzas Armadas y la Policía de Bolivia le sugirieron a Evo Morales su renuncia. Finalmente, no encontró otra posibilidad que dimitir luego de haber estado aproximadamente 14 años en el poder.
El modelo del avión militar de México
Evo Morales viajó en un avión modelo Gulfstream 550 de la Fuerza Aérea de México, cuya matrícula es Mat -3916. Según la revista especializada Defensa, esta aeronave “era empleada para el transporte del presidente y secretarios de estado en los gobiernos anteriores”.
El medio detalla que este modelo de avión posee dos motores Rolls-Royce BR710 que le permite tener un alcance de 12,500 kilómetros. En cuanto a la capacidad, puede trasladar hasta a 19 pasajeros.
El modelo Gulfstream 550 es fabricado por la empresa aeronaútica Gulfstream Aerospace. Mide de largo al menos 29 metros y de ancho, 8 metros.
En la actualidad, el gobierno de AMLO usa este avión para el traslado del alto mando militar y naval, según detalla La Nación.
Diversos videos de YouTube muestran la elegancia en el interior de este modelo de avión. Los asientos, muebles y espacios tienen finos acabados. Al parecer, está diseñado para viajar en total comodidad.
La página web de la empresa fabricante Gulfstream Aerospace también muestra imágenes de esta aeronave llena de confort.
El periplo
El avión de la Fuerza Aérea mexicana llegó este lunes a Lima. El ministerio de Relaciones Exteriores de Perú emitió un comunicado afirmando y dando detalles de este aterrizaje.
“En la fecha, a solicitud del Gobierno de México se concedió permiso de sobrevuelo y abastecimiento de combustible en nuestro país a un avión oficial mexicano, el cual ha partido a las 6:30 pm con destino a Bolivia. Esta decisión es consistente con nuestras obligaciones derivadas de la Convención de Caracas de 1954 sobre Asilo Diplomático”, indica el comunicado.
“El Gobierno del Perú reitera su compromiso con una transición pacífica y dentro del orden constitucional en Bolivia, conforme a lo expresado en nuestro comunicado del día domingo 10 de noviembre”, agregan.
Anoche, Evo Morales abordó el avión en Bolivia. Su despegue se retrasó debido a que Perú prohibió el regreso de la aeronave a Lima.
Luego de la incertidumbre, fue el gobierno de Paraguay el que aceptó a la aeronave. Fue así como partieron al aeropuerto internacional Silvio Pettirossi de Asunción, donde hizo una escala de más de tres horas en esta madrugada. A las 5 am. partió con rumbo a México, donde llegó después de las 11 am. (hora local).
El asilo político en México
Según explica El Universal, se concede este tipo de asilo únicamente a una persona desterrada o que ha huido de su país por motivos políticos.
La web de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), indica que la figura del asilo se refiere a una práctica mediante la cual un Estado garantiza la protección, el amparo y la asistencia de aquellas personas que han huido de su país de origen por diversas razones, generalmente relacionadas con la violación de uno o varios de sus derechos fundamentales.
“Aunque suele asociarse al plano netamente político, en realidad se trata de un recurso más amplio, que también engloba a quienes sufren persecución por su raza, religión, nacionalidad, pertenecer a un determinado grupo social o por sus opiniones políticas”, explican.
La ACNUR también detalla que la petición de asilo se realiza a un segundo o tercer país que ofrezca las garantías de seguridad y protección que el Estado del que procede el solicitante no está en condiciones de brindar. “Generalmente, este país realiza un estudio pormenorizado de la solicitud y, al final del proceso, emite un veredicto positivo o negativo”, aclaran.