Teherán. El guía supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, descartó este martes cualquier tipo de negociación con Estados Unidos, en plena escalada de tensión por los ataques a las instalaciones petroleras de Arabia Saudita que Washington atribuye a Teherán.
“La política de 'máxima presión' contra la nación iraní es inútil y todos los responsables de la República Islámica de Irán creen unánimemente que no habrá negociaciones con Estado Unidos a ningún nivel”, dijo Jamenei citado en su web oficial.
► Qué países son enemigos y cuáles aliados en uno de los polvorines del planeta► Por qué EE.UU. guarda millones de barriles de petróleo bajo la tierra
Teherán y Washington están enfrentados desde mayo del año pasado, cuando Estados Unidos se retiró unilateralmente del acuerdo de 2015 sobre el programa nuclear de Irán y volvió a aplicar duras sanciones económicas al país, en una campaña que llama de “máxima presión”.
Irán respondió dejando de cumplir varios de su compromisos de ese acuerdo, que consistía en renunciar a su programa nuclear a cambio del levantamiento de las sanciones económicas.
Estados Unidos dijo el lunes que su ejército se está preparando para responder al ataque “sin precedentes” con drones a varias instalaciones petroleras de Arabia Saudita y que obligaron a reducir su producción de crudo a la mitad.
Trump aseguró que Estados Unidos está preparado para apoyar a Arabia Saudita, un aliado clave, tras los ataques que además tuvieron el efecto de disparar el precio del barril.
“No estoy buscando entrar en un nuevo conflicto pero a veces hay que hacerlo”, declaró Trump. “Fue un ataque a gran escala y podría resultar en un ataque mucho, mucho mayor”, añadió. “A la mayoría les parece que fue Irán”, afirmó.
Por su parte el secretario de Defensa estadounidense, Mark Esper, acusó a Irán de ser una fuerza desestabilizadora en la región pero no lo citó explícitamente como responsable del ataque.
Según Esper, el ejército está trabajando con sus socios para “tratar este ataque sin precedentes y defender el orden internacional basado en reglas que está siendo socavado por Irán”.
— “Máxima presión” —
Un día después de los ataques, la Casa Blanca manifestó que Trump podría reunirse con su homólogo iraní Hassan Rohani en Nueva York la semana que viene, donde se celebra la Asamblea General de la ONU.
Pero Jamenei sostuvo que cualquier tipo de negociación con Irán llevaría a Estados Unidos a “imponer sus demandas” al país y significaría el éxito de su política de “máxima presión”.
Rohani ya había descartado también cualquier posibilidad de negociaciones directas con Estados Unidos a menos que levante las sanciones económicas.
Según el presidente, incluso si Washington levantara las sanciones, las negociaciones deberían tener lugar en el marco del acuerdo de 2015 sobre el programa nuclear.
El guía supremo Alí Jamenei reiteró su rechazo este martes y aclaró que si Estados Unidos “se arrepiente” y vuelve al Joint Comprehensive Plan of Action (el nombre oficial del acuerdo de 2015) luego podrá hablar con Irán y las otras partes del pacto.
“De lo contrario no puede haber negociaciones” entre responsables de ambos países “a ningún nivel, ni en Nueva York ni en ningún otro lugar”.
Los rebeldes hutíes de Yemen, que tienen el apoyo de Irán, reivindicaron el ataque a las instalaciones sauditas de Abqaiq (la mayor planta de tratamiento de petróleo del mundo) y al campo petrolero de Jurais, en el este del país.
Los responsables sauditas dijeron que el ataque utilizo “armas iraníes” pero no acusaron directamente a su rival regional.
Por su parte Rohani declaró que los ataques era un acto de autodefensa por parte de los hutíes contra la coalición militar liderada por Arabia Saudita que se enfrenta a ellos en Yemen desde 2015.
“Yemen es objeto de bombardeos diarios (...) El pueblo de Yemen se ha visto forzado a responder, solo se están defendiendo”, pronunció el presidente iraní en Ankara.
La Asamblea General de la ONU empezará el próximo 24 de septiembre en Nueva York.
Fuente: AFP