La noche del sábado, un ataque israelí con misiles sobre la casa de la familia de un funcionario de la policía de Gaza mató a 21 personas, casi todos parientes, convirtiéndose en la peor tragedia desde que el país hebtreo inició la operación Margen Protector a inicios de la semana, informó el Ministerio de Salud de Gaza.
El menor de la foto que llora de manera desconsolada es uno de los pocos sobrevivientes de la familia del policía Tayseer Al-Batsh, el objetivo del ataque y quien sobrevivió al bombardeo y permanece internado en un hospital.
La televisión palestina mostró imágenes duras de los minutos posteriores al ataque a la casa del policía, donde se ve a los soscorristas que buscan desesperados a posibles sobrevivientes.
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El cohete cayó en la casa de un primo del policía, a quien visitaba poco después de las oraciones del Ramadán.
“Es un desastre”, dijo Abu Aisha, que vive a dos cuadras del lugar.
“La explosión fue tan fuerte que nuestra casa se estremeció. Todo el polvo y los escombros se introdujeron por las ventanas, pues no las podemos dejar abiertas pues en caso de bombardeo se rompen”, añadió.
La noche del sábado fue la más sangrienta desde que se inició la ofensiva israelí contra el movimiento Hamas, com 56 muertos, lo que eleva a 166 el número total de fallecidos, la mayoría civiles.