FRANCISCO MIRÓ QUESADA CANTUARIAS
Director General
En la clausura de la XVII Cumbre Iberoamericana que se realizó en Santiago de Chile, Hugo Chávez interrumpió abruptamente al presidente del Gobierno Español, José Luis Rodríguez Zapatero, quien solicitaba una actitud de respeto para José María Aznar, ante las declaraciones que había emitido Chávez en las que descalificaba al ex presidente español. Esta situación produjo la inmediata intervención del rey de España, quien dijo al jefe del Estado de Venezuela: “¿Por qué no te callas?”. Chávez, de acuerdo con su carácter, quiso que el rey le pidiera disculpas, pero intervino Michelle Bachelet, la presidenta anfitriona, y solicitó diplomáticamente que no se alterara el curso de la reunión.
Hugo Chávez asumió la presidencia de Venezuela en 1999 y decretó la activación del Poder Constituyente, impulsando dos referendos con la finalidad de modificar la Constitución de 1961. Como resultado de ellos, entró en vigencia la nueva Constitución de 1999, con la cual convocó elecciones generales, que ganó con un 59,76%; logró también la mayoría en el Congreso venezolano. Hubo una clara percepción de falta de transparencia e imparcialidad en el proceso electoral, factores que produjeron malestar en los opositores y provocaron que se agudizara la crisis política que desembocó en un golpe de Estado el 2002. Este hecho llevó a Chávez a prisión por dos días, pero un contragolpe militar lo repuso en el poder y los frustrados golpistas se vieron obligados a huir. Cuando se produjo la segunda elección de Chávez, inició una campaña de propaganda en todos los medios que manejaba, especialmente la televisión. La oposición, que al principio estuvo encabezada por Henrique Capriles, quedó totalmente mediatizada. Capriles tuvo que reconocer su derrota y con el paso el tiempo el gobierno de Chávez se tornó cada vez más dictatorial y arbitrario.
Chávez acusaba a la oposición de estar apoyada por el “imperialismo norteamericano” y llegó un momento en que las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos se tornaron tensas, a tal punto que Chávez expulsó a dos diplomáticos norteamericanos, lo cual fue respondido con idénticas medidas por el gobierno de Barack Obama. En el 2004, Chávez fundó la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), un movimiento que él llamó el Socialismo Bolivariano del Siglo XXI, de acuerdo con Fidel Castro, presidente de Cuba. A este movimiento posteriormente se sumarían Bolivia, Nicaragua, Honduras, Ecuador y los estados caribeños pertenecientes a la Comunidad del Caribe (Caricom). Chávez pretendió aplicar la revolución bolivariana a otros países, como el Perú, fundando las casas del ALBA y enviando misiones médicas con el propósito de ganar voluntades entre las clases más necesitadas. No logró intervenir en la política peruana, lo cual hubiera sido intolerable. Hugo Chávez atacó fuertemente a los diarios y canales de televisión que se oponían a su gobierno, expropió importantes empresas de diferentes nacionalidades, sin pagarles el justiprecio. Lo paradójico del caso es que Venezuela posee grandes reservas de petróleo y quien le compra una gran proporción de ese combustible es Estados Unidos. Pero, además, Chávez regalaba petróleo a Cuba, Nicaragua y otros países. A pesar de su riqueza, Venezuela, debido a un mal manejo económico, vive un alarmante aumento de los índices de inflación y otros indicadores macroeconómicos. Además, su índice de criminalidad es el más alto de América Latina.
El gobierno de Chávez, como ya se dijo, se fue tornando cada vez más dictatorial. No renovó la licencia de funcionamiento a la más importante televisora venezolana; presionó económicamente a los diarios de oposición para que morigeraran sus críticas. Chávez, por sus condiciones de líder, adquirió una gran popularidad entre las clases más necesitadas. Pero un día, el presidente venezolano enfermó de cáncer y, pese a seguir tratamientos especializados en Cuba, falleció el 5 de marzo del 2013. Antes de su mu erte nombró a Nicolás Maduro su sucesor, quien salió elegido presidente, fraudulentamente, como lo demostró Capriles. La situación política y económica en Venezuela va empeorando día a día notablemente. La inflación es galopante, la criminalidad ha superado todos los límites y Maduro ha impuesto un régimen tremendo de represión, que ha desatado una ola de violencia.
Nicolás Maduro organizó una conferencia de paz con el fin de buscar soluciones a las demandas de la población de su país, en la cual Capriles no ha participado al considerar que el gobierno no daba señales de fomentar la paz. Pese al interés de Maduro de intentar una conciliación con Capriles y los estudiantes que se han lanzado a las calles, estos parecieran decirle: “¿Por qué no te callas?”.