Principalmente en la corte inglesa y también en las cancillerías de los aliados existe sumo interés en conocer cuál será el futuro del derrocado zar Nicolás II y su familia. Se tejen toda suerte de especulaciones e incluso se habla de intentos de fuga. Negociar con los bolcheviques resulta sumamente difícil para conseguir que el monarca y los suyos abandonen Rusia y encuentren refugio en otro país europeo. Como se sabe, el heredero de la corona es un niño gravemente enfermo que requiere de cuidados especiales para conservar la vida. H.L.M.