Las fiestas del Centenario se avecinan sin que se desarrollen hasta ahora, por los llamados a hacerlo, no digamos esfuerzos, ni siquiera las actividades necesarias para que nos presentemos decorosamente ante las embajadas extranjeras que nos visitarán y las numerosas personas de holgada posición que buscan, a través del mundo, oportunidades semejantes para recorrer los países que cobran para ellos una fisonomía especialmente sugestiva. Requerimos urgentemente diversos edificios absolutamente necesarios para respaldar la capitalidad de Lima. Esperamos, sobre todo, que el emblemático hotel de lujo programado se construya. H.L.M.