18 de octubre. Con excepcional concurrencia se llevó a cabo la tradicional procesión del Señor de los Milagros, que ha recorrido los distintos barrios de la capital. Esta procesión del Cristo milagroso congregó en torno de sus andas a una multitud que ocupaba varias cuadras y hacía el trayecto entonando, con devoción, cánticos religiosos. Hubo muchos hábitos morados en señal de penitencia cumpliendo así una promesa por alguna gracia recibida. En el trayecto se ofreció al Señor de los Milagros numerosos exvotos y de los balcones se arrojó gran cantidad de flores. H.L.M