Es abogado y tiene 47 años. Javier Ísmodes postula por tercera vez al Gobierno Regional de Arequipa. En las elecciones del 2014, quedó en segundo lugar ante Yamila Osorio.
—En su plan de gobierno afirma que impulsará Tía María, siempre y cuando invierta en un fideicomiso para Islay.Tía María no puede ir si no hay licencia social. Tía María se ha convertido en un instrumento de politización. Yo prefiero poner a un ladito a Tía María y mejor hablemos de la represa.
—¿Por qué ha cambiado de opinión? Antes estaba a favor del proyecto.Es que no he cambiado. Necesitamos ser responsables con el medio ambiente y ese debe ser el camino de todo el empresariado en general. Debemos ser responsables con los proyectos mineros, el planeta ya no da más.
—Pero si no hay licencia social no va.Ahora no va, porque no hay licencia social y no quiero insistir en ese tema. De ser gobernador, Dios mediante, no voy a insistir en ese tema. Creo que podemos superar Tía María, en Islay se puede hacer cuatro proyectos Majes.
—¿Tiene usted un equipo técnico?Nuestro equipo es competente y de primera. Marco Cáceres [está] en planeamiento, es MBA de Centrum Católica; en emprendimiento está Óscar Barriga; en la parte hídrica está Isaac Martínez, entre otros. Tenemos nuestro equipo completo de 26 personas.
— ¿Cuál es su propuesta concreta para Majes Siguas II?Majes tiene que tener acciones inmediatas. Debe haber módulos [parcelas] grandes [de 200 hectáreas] que sean el motor de la economía y también generar pequeña empresa agroindustrial de 15 hectáreas. Yamila Osorio no debe firmar la adenda 13, es peligroso.
—¿Por qué es peligroso?[Es] mi humilde opinión, si se firma la adenda, el gobierno pondrá el 76% del financiamiento del proyecto, ¿para qué quiere socio estratégico? Creo que eso es financiamiento discreto a favor del contratista, no es cambio tecnológico. Lo que pasa es que [el contratista] no tiene plata para seguir.
—¿Usted se considera un candidato de derecha?Mi primera militancia política a los 17 años fue en un partido llamado Izquierda Socialista. Cuando se acabó la izquierda, dejé de militar en partidos. Me reanudé en la política hace nueve años con movimientos independientes. El hecho de que trabaje con empresas grandes o pequeñas no quiere decir que soy de derecha.
—¿Entonces?Tengo una posición de centro, progresista por el lado social, pero dinámica en la parte económica. A Arequipa no le vas a discutir si eres de derecha o izquierda, Arequipa necesita programas. No es un tema ideológico, es convicción.
— ¿Cómo gestionará los recursos para ejecutar los proyectos que promete?El gobierno regional tiene transferencias del Gobierno Central, tiene canon minero, sobrecanon y también hay otros mecanismos como APP. En obras por impuestos, la capacidad de financiamiento es casi nula. Tendríamos que trabajar expedientes técnicos bien hechos y hacer gestión en los ministerios.
— ¿Cuáles serían sus medidas en los 100 primeros días de gobierno?Uno, agua y desagüe para Horacio Zeballos. Dos, intervenir la Variante de Uchumayo. Tres, recomponer el directorio de Autodema. Cuatro, reorganizar el sistema de saneamiento físico y legal de los pueblos; y cinco, trabajar en la reimplementación de centros de salud y colegios, hacer los expedientes técnicos y la recategorización de hospitales.
— ¿Cuál es la opinión que tiene de su opositor político? Más allá de las críticas, [Cáceres] está haciendo su campaña con mucho esfuerzo igual que yo. Estar en la segunda vuelta no es fácil.
Síguenos en Twitter como @PeruECpe