Los desagües de las provincias de Otuzco seguirán vertiéndose al cauce del río Moche, pese a que en el 2010 esta municipalidad junto a la de Julcán y Santiago de Chuco se comprometieron a solucionar el problema del tratamiento de sus aguas contaminadas.
Santos Alvarado, responsable de medio ambiente de esta comuna, reconoció que incumplirán con el plazo de cuatro años (que culmina en diciembre de este año) establecido por el Programa de Adecuación de Vertimientos y Reúsos (PAVER).
Otuzco ya cuenta con un perfil para construir la infraestructura por S/. 80 millones aprobado por el Ministerio de Vivienda. Pero esta solo servirá para el distrito capital. En las demás jurisdicciones de la provincia como Sinsicap, La Cuesta y Paranday el problema seguirá sin tener solución.
“Estamos en conversaciones con la Administración Local del Agua (ALA) para que los plazos se replanteen. No sabemos cuántos años más. Eso lo dirá el tema técnico”, señaló el representante de la municipalidad.
La situación es distinta en la provincia de Julcán. En dos meses comenzaría a funcionar la planta de tratamiento de aguas residuales ubicada a cinco kilómetros de esta localidad, según el gerente de esta municipalidad, Romel Espinoza.