Un camión recolector de basura del Servicio de Gestión Ambiental de Trujillo (Segat) arrolló a una niña de dos años y ocho meses que dormía en el relleno sanitario de El Milagro.
Los trabajadores del botadero contaron que la madre de la infante era nueva en el lugar por lo que no sabía que allí está prohibido ingresar con menores de edad.
Kenny Heredia García, gerente del Segat, indicó que este trágico hecho podría repetirse pues los recicladores suele cometer la irresponsabilidad de llevar a sus niños - incluso bebes - a dicho espacio.
“Según tengo entendido, esta señora no es una trabajadora frecuente. Dejó a su hija descansando y ella se fue a una celda (espacio de basura) a 80 metros de distancia. Los camiones van y vienen, pero como la pequeña estaba descansando, tapada con cartones, el conductor no la vio”, indicó en declaraciones que recoge Andina.
A su turno, Gloria Montenegro Figueroa, alcaldesa trujillana, llegó hasta el lugar y ofreció hacerse cargo de los gastos del sepelio de la menor.