JOHNNY AURAZO
La tesis de César Vallejo ha comenzado literalmente a hablar. El trabajo de investigación con el que el poeta universal se graduó de bachiller en Letras, en la entonces Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Trujillo (UNT), ha sido restaurado en su totalidad casi un siglo después de andar enfermo por los andamios de bibliotecas olvidadas en la Capital de la Primavera.
El título de la tesis es “El romanticismo en la poesía castellana”. El estudio fue presentado por un César Vallejo de solo 23 años el 22 de setiembre de 1915, cuando comenzaba a rozarse con intelectuales de la época como Antenor Orrego y Víctor Raúl Haya de la Torre, integrantes de la bohemia trujillana después conocida como Grupo Norte.
El estudio consta de 49 páginas y ha sido calificado por el rector de la UNT como “una verdadera joya histórica de su alumno más ilustre en 190 años”. Orlando Velásquez Benites, también presidente de la Asamblea Nacional de Rectores (ANR), revela a El Comercio que pedirá se declare patrimonio cultural la tesis del extinto poeta para así garantizar que este documento se conserve como parte importante de la historia de la literatura peruana.
UN TRABAJO OLVIDADO
La restauración de la tesis del escritor nacido en la provincia andina de Santiago de Chuco, en La Libertad, se inició en noviembre del 2013 y acaba de ser entregada a las máximas autoridades de la UNT.
El trabajo académico fue encontrado en un estante de la Beneficencia Pública de Trujillo y luego entregado al rectorado de la UNT para su restauración. Se cree que tras su sustentación, en 1915, el documento fue guardado en la biblioteca principal de la universidad y después entregado a distintas personas para su cuidado.
ÁCAROS SALVADORES
En estos casi 100 años de publicación, la tesis fue atacada por unas termitas conocidas científicamente como ‘Cryptotermes brevis’, voraces bibliófagos que tras devorarse 14 páginas, fueron atacados por ácaros y el trabajo académico no logró perderse. “Si no fuese por los ácaros, hoy no hablaríamos de la tesis de Vallejo”, cuenta sonriente Miguel Saldías Roselló, prestigioso restaurador del estudio y del Archivo Regional de La Libertad.
Para recuperar el ejemplar, Miguel Saldías injertó más de un metro de papel de pasta mecánica de la época rico en celulosa. Las láminas las había guardado de distintos trabajos de restauración. Antes, sin embargo, sometió a las hojas a un tratamiento con vapor para devolverle su humedad.
DE PUÑO Y LETRA
Se cree que César Vallejo escribió su tesis con una máquina de escribir de la marca Remington. Si bien no se ha podido recuperar el 3% de la tipografía original, llama sobremanera la atención las correcciones que hizo el escritor con su puño y letra. Las tildes, por ejemplo, están todas hechas con pluma porque la máquina de escribir no contaba con un sistema para tildar las palabras.
“César Vallejo tenía una suerte de obsesión por el lenguaje correcto; era muy riguroso en el manejo del idioma”, sostiene Juan Villacorta Vásquez, decano de la hoy Facultad de Educación y Ciencias de la Comunicación de la UNT.