El presidente de la Federación Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes (Fenamad), César Augusto Jojajé, informó que el último lunes miembros de la comunidad de Monte Salvado, ubicada a orillas del río Piedras (en la provincia de Tambopata, en Madre de Dios), hallaron cerca de sus viviendas herramientas y desperdicios dejados por indígenas en situación de aislamiento, de la etnia mashco piro.
El dirigente se mostró preocupado, pues teme que se produzca un enfrentamiento.
Recordó que el pasado 18 de diciembre, más de 300 indígenas incursionaron en este poblado y se llevaron sus cosechas de yuca y plátanos. Además, mataron a sus animales y destruyeron sus viviendas y enseres. Esto generó que el Ministerio de Cultura dispusiera el traslado de sus habitantes –entre ellos varios niños– a Puerto Maldonado, donde permanecieron hasta febrero.
Las autoridades buscan evitar un contacto entre ambas poblaciones, ya que los mashco piros podrían contagiarse de enfermedades, como la gripe, que para ellos serían mortales.
Desde hace algunos meses, un grupo de especialistas del Ministerio de Cultura analiza las posibles causas que han originado que los indígenas abandonen continuamente la Reserva Territorial Madre de Dios y busquen alimento en las comunidades aledañas. Los resultados aún se desconocen.
El año pasado, los comuneros de Monte Salvado tuvieron cuatro encuentros con los indígenas, con quienes entablaron breves diálogos en la lengua yine. Ellos afirman que los mashco piros solo querían comida, aunque se mostraron agresivos.
Otras aparicionesHace algunas semanas, en las localidades de Shipitiari y Diamante, ubicadas en las márgenes del río Madre de Dios, se dio cuenta del avistamiento de otro grupo de mashco piros.
En un comunicado, el presidente de la comunidad de Shipitiari, Henry Rosas Álvarez, aseguró que algunos indígenas se encontrarían en mal estado de salud. Indicó que su presencia se registra desde el 2011 y responde únicamente a la necesidad de tomar los frutos de sus sembríos.
El dirigente expresó que en su poblado están dispuestos a acogerlos; no obstante, esto vulneraría la Ley para la Protección de Pueblos Indígenas u Originarios en Situación de Aislamiento y en Contacto Inicial.