En un alto de sus presentaciones en la ópera Romeo y Julieta el tenor peruano Juan Diego Flórez viajó a Puno para reunirse con los niños reunidos por la fundación que él dirige Sinfonía Por el Perú.
Durante la visita Flórez visitó los talleres y música y fabricación de instrumentos musicales y les prometió a los niños que ocho de ellos participarán en el concierto que ofrecerá en la sede de las Naciones Unidas en la ciudad de Ginebra (Suiza).
Flórez compartió todo un día con los futuros músicos que su fundación prepara en Puno y hasta animó a probarse una de las másacaras de La Diablada.