La Unidad de Investigación de El Comercio publicó hoy un informe donde cinco ciudadanos, que figuran como aportantes a la campaña presidencial de Alan García del 2006, negaron que hayan contribuido de forma económica a esta, pese a que sus nombres figuran en los registros de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE).
Los documentos presentados por el Partido Aprista a esa entidad señalan que cuatro de los ciudadanos contactados por este Diario donaron S/1.000 el 31 de diciembre del 2005, y el quinto; S/2.400 entre los meses de marzo y mayo del 2006. Sin embargo, ellos afirman que sus nombres fueron usados.
Al respecto, conversamos con tres expertos para que nos brinden un análisis de los delitos que se pudieron haber infringido en este hecho y la situación en la que posicionaría al ex presidente Alan García esta revelación.
-Expertos piden investigar supuestos aportes falsos-
Para el abogado penalista Luis Lamas Puccio, el caso publicado por este Diario debe ser parte de una investigación fiscal.
“Esta es nueva información que está apareciendo y que está enmarcada en el contexto de otras investigaciones relacionadas a lavado de activos en concreto”, agregó.
En tanto, Ivan Montoya, ex jefe de la Unidad de Extradición de la Procuraduría Anticorrupción, manifestó que esta información se hubiese podido sumar a otras investigaciones que se viene realizando contra el Apra, pero, dado que el hecho es del 2006, la fiscalía debe analizar si se abre una nueva carpeta fiscal.
“Habría que ver bien [el caso] y no sé si tenemos referencias de algunos de los directivos de Odebrecht en que, en el 2006, hicieron aportes de campaña para ir conectando y ampliando las investigaciones”, manifestó.
Al respecto, la abogada penalista Ingrid Díaz comentó que el hecho amerita una nueva investigación fiscal, ya que se dio antes de que Alan García fuese presidente y, por tanto, no tiene vinculo con las investigaciones fiscales que ya se le viene realizando.
“Es un caso diferente, porque este [hecho] es sobre el financiamiento de su campaña. Es distinto”, dijo.
- Los presuntos delitos infringidos-
Para Lamas el hecho estaría enmarcado en el delito de lavado de activos que ya estaba incorporado como delito en la legislación penal del 2006.
“El lavado de activos ya estaba incorporado como delito en la legislación penal. Es decir, incluso no se necesitaría esta [nueva] propuesta legislativa de incorporar el financiamiento de los partidos políticos, porque la ley 2773 [del Código Penal] ya tipificó el delito de lavado de activos en sus distintas modalidades” dijo.
Montoya refirió que la fiscalía tendrá que analizar cuál sería la imputación del caso.
“Estamos hablando de aproximadamente 12 años. […] [Habrá que ver] si [la imputación] es contra la fe pública, por falsedad, probablemente ya haya proscrito. Si es lavado de activos tendría que verse bien del monto del que estamos hablando [en el hecho], porque, por ahora, se podría considerar simulado de aportes”, manifestó.
Díaz agregó que aún es muy pronto para determinar el delito, pero manifestó que si se llega a comprobar que el dinero aportado no ha sido brindado por los presuntos aportantes y si se determina que es dinero de fuente ilícita existiría un supuesto de lavado de activos.
-La situación de Alan García-
El penalista Luis Lamas manifestó que la situación del ex presidente, después de esta revelación, dependerá de la actitud que tome la fiscalía, porque, por el momento, no se ha formalizado ninguna investigación.
“Habiendo ya precedentes importantes [como] en el caso de Keiko Fujimori y Ollanta Humala. [...] Debería empezar una etapa de indagaciones o de investigación preparatoria con mayor razón, porque el Congreso está tratando, por todos los medios, de excluir esto [de lavado de activos] del ámbito penal con el proyecto de ley del financiamiento de los partidos políticos”, detalló.
Posición contraria mostró el ex procurador Ivan Montoya, quien manifestó que, por el momento, no existe una variable en la situación del ex mandatario.
En esa misma línea se pronunció Díaz, quien refirió que aún no se puede determinar si este hecho agrava la situación del ex presidente.
“Yo no puedo determinar si agravaría su situación, porque es una investigación muy preliminar que ni siquiera probablemente se ha hecho [la indagación del hecho]. Entonces, no podría [yo] afirmar [que agrava la situación de Alan García]”, concluyó.