La cancillería entregó esta tarde al Embajador de Uruguay, Carlos Barros, un informe que detalla la posición del Perú ante el pedido de asilo diplomático que presentó el ex presidente Alan García.
La documentación puntualiza, mediante una nota diplomática, que en el Perú no existe persecución política, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores.
La nota diplomática agrega que en nuestro país “impera la democracia, el estado de derecho y la separación de poderes, así como la plena vigencia de los derechos humanos y libertades fundamentales”.
Además recuerda el Compromiso de Lima “Gobernabilidad Democrática frente a la Corrupción”, adoptado en abril pasado, durante la Octava Cumbre de las Américas. Este recoge el compromiso de Uruguay, Perú y otros países de cooperar en la lucha contra la corrupción.
El viceministro de Relaciones Exteriores, Hugo de Zela, entregó la documentación al embajador Barros en la sede principal de la Cancillería.
“La documentación será enviada de inmediato al gobierno de Uruguay”, dijo Barros tras abandonar la cancillería.
“Yo no considero nada”, agregó el embajador al ser consultado si piensa que García es un perseguido político.
Barros precisó que la documentación se revisará “todo el tiempo que sea necesario”.
El gobierno de Uruguay había indicado que estaba a la espera de que el Perú le suministre información sobre el caso del líder aprista para determinar si hay persecución política y, por lo tanto, si concede o no el asilo a Alan García.
El ex mandatario permanece desde el sábado en la residencia del embajador de Uruguay en Lima, a cuyo país solicitó un asilo alegando una persecución política en su contra.
El Ministerio Público investiga al líder aprista por los presuntos delitos de lavado de activos y colusión.