El Facebook oficial del prófugo ex presidente Alejandro Toledo está actualizado. Como portada tiene una foto de su última participación en un evento de las Naciones Unidas, Nueva York. Un evento en el que reapareció públicamente en mayo pasado y que hasta generó una protesta del Perú ante el organismo internacional por esta invitación.
De perfil tiene una foto junto a su esposa, la también prófuga Eliane Karp, acompañado de un mensaje de aliento para el mundial de fútbol en Rusia: no parece que Alejandro Toledo, desde hace un año, tuviese una orden de captura nacional e internacional por el presunto pago de sobornos de la empresa Odebrecht. Según su abogado Heriberto Benítez, el ex mandatario vive de vender sus libros. “Todo le han quitado”, ha dicho.
En los últimos doce meses, lo que más ha compartido desde su Facebook con el mundo exterior han sido –y son– las publicaciones del grupo “Toledo, No a la Persecución Política”. Y es que ese ha sido el argumento principal en todo el año que ha pasado: que la prisión preventiva se trata de una persecución política. El tratado de extradición con Estados Unidos es claro sobre este punto: no se concederá cuando el delito por el cual se solicita sea de carácter político.
Lo cierto es que la orden de 18 meses de prisión preventiva existe y Alejandro Toledo se ha resistido a cumplirla hasta ahora. En realidad, a cumplirlas: tiene dos órdenes de este tipo y la segunda fue poco tiempo después por el Caso Ecoteva. En esta última está incluida la ex primera dama Eliane Karp. El viernes 9 de febrero serán renovadas por seis meses más las órdenes de captura nacional e internacional para el ex mandatario, como indica la ley.
–El avance de la extradición–“Voy a mencionar un precepto moral fundamental de la sociedad incaica: 'Ama sua', no seas ladrón”. De esta forma, el fiscal Hamilton Castro, líder del equipo especial anticorrupción del Ministerio Público, inició la sustentación del requerimiento de prisión preventiva contra Toledo el 9 de febrero del 2017. Se trataba de una audiencia histórica que culminó con una decisión judicial histórica.
Aquella vez escuchamos decir al fiscal Castro que la constructora brasileña hizo 18 depósitos a empresas 'offshore' vinculadas a Josef Maiman –ahora ex amigo del ex presidente y colaborador en este caso– por un total de US$ 9'626.010.
Castro mostró como principal elemento de convicción la declaración del ex representante de Odebrecht en Perú Jorge Barata, como aspirante a colaborador eficaz de la fiscalía. Él declaró que el ex mandatario le pidió US$35 millones para otorgar la buena pro de la carretera Interoceánica. Finalmente, solo fueron entregados US$20 millones. En este momento se confirmó que Barata se estaba convirtiendo en el hombre que delataría todas las coimas en el país y por quien empezarían a caer los llamados “peces gordos”.
Desde un principio, la fiscalía y el Gobierno anunciaron que habían optado por el camino de la extradición para conseguir que Toledo se someta a la justicia peruana. El ex líder de Perú Posible decidió quedarse en San Francisco, California, en Estados Unidos. Antes estuvo en París, Francia. En la ciudad estadounidense se le vio pocas semanas después de la orden de prisión: se le vio tranquilo, paseando y comiendo en restaurantes. Toledo nunca tuvo impedimento para salir del Perú.
El pedido de arresto provisorio con fines de extradición fue enviado de inmediato tras la orden de prisión preventiva para Toledo. Sin embargo, hasta ahora, no existe ninguna respuesta oficial.
El 29 de diciembre, la fiscalía envió formalmente el requerimiento de extradición al despacho del juez Richard Concepción Carhuancho. Lo que sigue ahora es que el magistrado arme este cuadernillo y lo envíe a la Corte Suprema para su aprobación.
Este Diario pudo conocer que el cuadernillo está avanzando en más de un 50%. Fuente judiciales precisaron que en el despacho de Concepción Carhuancho consideran que las autoridades del estado de California son uno de los “más garantistas” del país norteamericano.
Desde enero, la fiscalía ha enviado tres veces al despacho de Concepción Carhuancho más información –estas serían más pruebas tras la colaboración de Maiman– para que se fortalezca el pedido de extradición. El juez ha solicitado al fiscal Castro una subsanación, que deberá ser respondida antes del lunes 12, para culminar con el cuadernillo y enviarlo este febrero.
No bastará, sin embargo, con que el juez cumpla con cada punto que exige el tratado de extradición con Estados Unidos, vigente desde el 2001 cuando Toledo era presidente de la República. La decisión final de enviar el cuadernillo a la justicia estadounidense es política y la tiene el Consejo de Ministros.