Llega apurado a la cita. Viene del pleno en el que se discute la mocin de interpelacin al ministro Jaime Saavedra. Es un da tan crispado que luego nos enteramos de que se especul si su retiro del hemiciclo se deba a una disidencia partidaria. Para nada! Aqu damos fe de que pactamos la entrevista das antes. Los lectores vern si Juan Sheput es un oficialista que ha tirado la toalla frente a la maquinaria naranja o alguien que afronta, con sus propios matices, la tensa cohabitacin con Fuerza Popular.
Cmo va la convivencia? Es una cohabitacin a la peruana. Si bien no est regulada por la oposicin, en la prctica se da. Hay una oposicin con agenda propia en el Congreso y un presidente que tiene que lidiar con esa realidad. Al final, sobre la fuerza de los hechos, hemos llegado a plantear razonablemente proyectos de ley.
No hay pacto, pero s entendimiento tcito. Esto se ve forzado por un tercer elemento, que es la fuerza de la opinin pblica.
Pero estamos en tensin. Hay quienes sugieren plantear la cuestin de confianza camino a forzar la disolucin del Congreso. Es un mecanismo que no se debe descartar, pero debe ser fruto de una profunda reflexin teniendo en cuenta su oportunidad y si es una opcin vlida. Para esta cohabitacin a la peruana la interpelacin a Saavedra es la prueba ms dura luego de la delegacin de facultades. No, es la consecuencia de muchas cosas, de denuncias, de las acciones del ministro. En lo personal, estoy de acuerdo con la interpelacin, mi bancada tambin, como un mecanismo de control poltico. El propio Saavedra ha sealado que est dispuesto a acudir a responder.
Cree que el resultado ser una inevitable censura? El Congreso sabr definir. Aunque soy de los que piensan, en virtud de los antecedentes histricos, que el solo hecho de ser interpelado, aunque no seas censurado, deja nocaut a cualquier ministro.
Es triste que un tema de la interpelacin sea los Panamericanos. Estn costando demasiado. Yo plante que hay que sincerar la situacin. No conozco ingeniero que me seale que se pueden concluir con xito las obras. Hay otras prioridades de caja, para la sequa, para Sierra Azul que podra mitigar sus efectos, el propio Minedu tiene prioridades en infraestructura educativa.
Estn los temas no explcitos en la interpelacin, como la reforma universitaria y la ideologa de gnero. Cmo debiera responder el ministro? Participando ms del debate pblico. Los tecncratas en general se abstraen de participar en el debate pblico y eso impide que las medidas se concreten, como el caso de la ley pulpn. En este caso [la Ley Universitaria] la participacin estelar la tuvo Daniel Mora; y la marginal, el ministro.
En el tema de la Ley Universitaria, hay bastante para negociar? Por supuesto, hay bastante por mejorar. Por ejemplo, estoy en desacuerdo con poner lmites a los 70 aos. S estoy de acuerdo con el ministro cuando cree que los rectores no deben tener un manejo protagnico en la Sunedu. Podran tener un papel opinante, pero no dominante.
Y qu decir a los conservadores que lo han agarrado de piata? Me parece lamentable que padres salgan a decir nadie se puede meter en la educacin sexual de mis hijos, y, sin embargo, no hacen nada por educarlos. Hay un vaco motivado por el temor, la tradicin. Se configura una pelea de conservadores y liberales, donde los primeros sienten que FP los representa; y los segundos, el gobierno? Es una discusin asolapada y mal enfocada. La interpelacin no va a tener xito si las preguntas no reflejan el motivo de la interpelacin. El problema de esa discusin es que se ha focalizado en los extremos, el congresista Julio Rosas en un extremo y personas progresistas en el otro. Lo que quiero decir es que la votacin y el entendimiento estn en el centro, entonces se requieren personas que objetivamente rescaten lo bueno. Hay que conquistar ese centro.
La reforma de la educacin podra continuar sin el ministro Saavedra? Por supuesto, soy absolutamente institucionalista. Se le hace un flaco favor a cualquier concepto de reforma si no se enfoca en las ideas e instituciones. No creo en insustituibles. Grandes prohombres han sido reemplazados.
Se han dado pasos positivos en materia de destrabe y simplificacin, pero no hace falta un discurso anticorrupcin ms enftico, pues la corrupcin subyace en las trabas? Claro, y el discurso anticorrupcin tiene que ir a sus dos extremos, al corrupto y al que corrompe. La legislacin va del lado del corrupto y no del que corrompe, que muchas veces estn en el sector privado. Mira el caso de las empresas brasileas: estn operando como si nada. Necesitamos personajes como Avelino Guilln, que con sus trayectorias demuestren que es posible mantenerse al margen de la corrupcin. La doctora Julia Prncipe ya est con nosotros, pero hay un vaco que tenemos que llenar. Estos temas no calan en el empresariado, en la poltica, en los medios.
Calan en el gobierno? Hablo de que no calan en la poltica en general ni en los empresarios del CADE. Los CADE, en lugar de ser fuente de polticas pblicas, son la inauguracin de la temporada de playa. Son como un retiro catlico. Ahora, a ponerse las pilas.
Nadine Heredia ha hecho un mal regalo al gobierno? A Nadine la condenan sus mentiras. No se puede creer en la persona que dice no es mi letra, no son mis agendas, niega relacin con brasileos y aparece un barbudo.
Fue una seal hacia FP la intencin de contratar a Vladimiro Huaroc en Petro-Per? Esto nos lleva una vez ms a la impericia de los tecncratas. No piensan. El tecncrata que ignora la poltica se convierte en su propio verdugo. Huaroc ha sido miembro de la plancha del partido que uni al Per para no votar [por ellos]. Cmo va a manejar conflictos una persona que en s misma es un conflicto, que su designacin genera conflictos?
Volviendo a la cohabitacin. En temas de seguridad, corrupcin, no hay discrepancias? No? No, y se ha visto cmo esos temas y el del agua se han facilitado en la Comisin de Presupuesto. Son razonables cuando se trata de identificar bien los problemas que el Ejecutivo ha sabido plantear como prioridad.
El presidente ha dicho de muchas formas que no alentar ningn proyecto continuista. Eso puede ir contra legtimas aspiraciones de miembros del gobierno y de PPK. Claro, pueden surgir figuras del mismo gobierno, ministros que empiezan a trabajar bien, y en sus partidos se convierten en alternativa, como Marisol Prez Tello, Martn Vizcarra. Est el derecho poltico de las personas a poder ser representantes.
La opinin pblica no querr que la poltica juegue con su seguridad y sus ansias de crecimiento. Eso puede llevar a acuerdos. O desacuerdos y eso puede llegar a una grave crisis de gobernabilidad. La opinin pblica es el fiel de la gobernabilidad y todo depende de con quin se alinee.
MS EN POLTICA:
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