El ex fiscal de la Nación, José Peláez Bardales, se presentó ayer ante la comisión del Congreso que investiga las irregularidades en la región Áncash.
A la salida de la sesión, solo detalló a la prensa que entregó la información que le solicitaron, de forma verbal o con documentos. “Como estoy bajo juramento, no puedo declarar pormenores”, se justificó.
Sin embargo, cuando se le consultó por el archivamiento de las denuncias contra el suspendido presidente regional de Áncash, César Álvarez, recordó que, antes de dejar la jefatura del Ministerio Público, en mayo pasado, determinó que todas las pesquisas archivadas sean revisadas. “En este momento hay una comisión que está trabajando en esa línea”.
El fiscal supremo también dijo que no le preocupa ser investigado por la comisión del Congreso. “No veo cuál vaya a ser el sustento para ello”, comentó.
El grupo recién definirá la próxima semana quiénes serán testigos y quiénes investigados para la elaboración de su informe.
Cabe recordar que el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) investiga a Peláez por remover a los fiscales que veían el Caso ‘La Centralita’, local donde presuntamente se realizaba espionaje a los opositores políticos a Álvarez. Asimismo, por nombrar como fiscales cercanos al suspendido presidente regional.