A Moisés Mamani lo conocimos públicamente –o lo empezamos a reconocer– el 20 de marzo del 2018, cuando fue protagonista en una conferencia de prensa junto al hoy presidente del Congreso de la República, Daniel Salaverry. Aquel día, la bancada de Fuerza Popular difundió una serie de videos para denunciar una presunta compra de votos contra la vacancia del entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski. Casi no lo dejaron hablar, pero estuvo al centro de la mesa.
A partir de ahí, el nombre de Moisés Mamani fue mencionado y su rostro reconocido, pero no por sus iniciativas legislativas propuestas y aprobadas en el Congreso. Desde ese momento, tras los llamados “Mamanivideos”, más de una denuncia –y con escándalo– se ha conocido del parlamentario de Fuerza Popular elegido por la región de Puno. Una lista de casos por la que terminó suspendido 120 días y sin inmunidad para ser investigado por el Ministerio Público.
–El reloj–Los videos que grabó Moisés Mamani con un reloj de pulsera fueron el detonante para que Kuczynski renuncie a la Presidencia de la República, antes de la vacancia. La renuncia fue al día siguiente de que el parlamentario por Puno haga público todo su material audiovisual, en el que él mismo era uno de los protagonistas.
Es en este episodio de la historia política de la República en el que aparece –asoma– Moisés Mamani. Ya no era un parlamentario más de los 74 que ingresaron al Congreso con Fuerza Popular. El reloj, incluso, era lucido por él como un objeto victorioso. Cuando Daniel Salaverry ganó la presidencia de la Mesa Directiva, el legislador puñeno mostró su voto por quien lo acompañó en su denuncia contra el Gobierno y enseñó, entre risas, el famoso accesorio en su muñeca. La joya no era el reloj.
–Presunto lavado–Moisés Mamani, antes de convertirse en un congresista de la República, intentó ser alcalde de la provincia de Moho, en Puno. Lo intentó dos veces –2006, 2010– y no tuvo éxito. Hasta que en el 2016, postuló junto al partido que lidera Keiko Fujimori. Consiguió 16,088 votos preferenciales.
“Moisés Mamani, el héroe anónimo que estaba detrás de los exitosos eventos”. Así se llama él mismo en un video publicado por el propio congresista en su canal de YouTube, en el que se detalla cuál fue su papel en la campaña de Fuerza Popular en Puno.
“Por el amor al partido aportó 100% de los viáticos para desplazar a jóvenes puñenos a Arequipa para encuentro con Keiko Fujimori”, dicen en la propaganda. Además, donó 60 cilindros de pintura, calendarios, banderines y carnés naranjas. Todos los comités de Puno de Fuerza Popular le agredecen.
Pero Mamani, así como la ex candidata presidencial, es actualmente investigado por el presunto delito de lavado de activos. La fiscalía lo investiga por encabezar una supuesta organización criminal que lava activos producto de la minería ilegal, la defraudación tributaria y el narcotráfico.
La pesquisa preliminar lleva abierta más de dos años. El plazo vence este agosto.
La indagación fiscal se inició a raíz de una denuncia del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) por mentir en su hoja de vida cuando postuló al Legislativo en las elecciones del 2016.
Este Diario reveló que su patrimonio excede en S/27 millones a lo que declaró al JNE. De acuerdo con la policía, el parlamentario tiene nueve inmuebles en Lima, Puno y San Martín valorizados en US$9’739.000. Es decir, más de S/32 millones. Él ha negado que esto sea cierto. “Espero que la policía y la fiscalía informen como debe ser”, respondió cuando se conoció este hecho.
–El desembarco–“Informamos que en el vuelo Juliaca-Lima LA2096 del día 14 de noviembre, fue desembarcado el congresista Moisés Mamani, por orden del capitán del vuelo, luego de recibir el reporte de la jefa de cabina de tocamientos indebidos”. Este fue el tuit que envió la aerolínea Latam para informar del caso que terminó con una suspensión y un levantamiento de inmunidad para Mamani.
El parlamentario negó los hechos y calificó la denuncia como “falsa y tendenciosa”. En su defensa, señaló que sufrió una descompensación producto de la diabetes que padece “hace 18 años”.
Por este hecho, que involucraba por primera vez a un congresista del actual Parlamento en una denuncia de esta gravedad, la tripulante de cabina de Latam impuso una denuncia por este delito en la comisaría del aeropuerto internacional Jorge Chávez. Ella aseguró que fue víctima de actos contra el pudor. La Octava Fiscalía Provincial Penal Corporativa del Callao está a cargo de las investigaciones.
“No me queda la menor duda [de la intención]. Pido que se haga justicia. Esperemos que no sea como parece: que no va a pasar nada”, dijo la tripulante de cabina de Latam en la única entrevista pública que ha dado, al programa “Punto Final”.
Finalmente, tras una recomendación de la Comisión de Ética, el pleno del Congreso aprobó casi dos meses después, el último 8 de diciembre, suspenderlo por 120 días sin goce de haber.
“Si hoy me voy sancionado, me voy con la frente limpia y regresaré por la puerta grande”, afirmó aquella vez.
Pero mientras cumplía la suspensión, se publicó un video del parlamentario en una celebración por Año Nuevo, en el que se burla de la denuncia presentada en su contra. “Esta es la mano zas”, se le escucha decir, entre risas. El Ministerio de la Mujer y la Defensoría del Pueblo condenaron esta actitud.
En marzo pasado, tras un pedido de la Corte Suprema, el Parlamento también aprobó levantar la inmunidad de Mamani para que pueda ser procesado por este delito denunciado. Sin embargo, la suspensión de 120 días concluyó hace algunas semanas y el legislador retornó a sus labores en el Parlamento. La investigación fiscal continúa.
–El segundo pedido–Esta mañana, la Comisión de Levantamiento de Inmunidad Parlamentaria debatirá un informe que recomienda aprobar el segundo pedido de la Corte Suprema de Justicia para que Mamani sea investigado ahora por los presuntos delitos: falsedad ideológica y falsedad genérica.
El legislador habría mentido en su declaración jurada para ser candidato por el partido Fuerza Popular en las elecciones del 2016. Según el predictamen al que accedió El Comercio, el entonces postulante por Puno consignó “estudios en el PRONOE San Alejandro de Arequipa durante los años 1994, 1995 y 1996 (3er, 4to y 5to de secundaria)”.
Sin embargo, un informe de la Secretaría General de la UGEL (Unidad de Gestión Educativa Local) de Arequipa señala que verificó las actas de las oficinas del PRONOE San Alejandro de Arequipa, pero Mamani no figura en ningún grado de estudios.
El 3 de marzo del 2016, un mes antes de las elecciones, el Jurado Electoral Especial (JEE) de Puno había advertido irregularidades en la hoja de vida de Mamani. Pese a ello, no objetó la candidatura al Congreso.
“Nunca he faltado a la verdad ni he mentido”, dijo hace algunas semanas Mamani a El Comercio. Las autoridades fiscales y judiciales lo determinarán próximamente. De llegar a una sentencia condenatoria en cualquiera de sus procesos, se sumará a la lista de los desaforados del Parlamento.