Durante los primeros meses del 2012, Valfredo de Assis Ribeiro, por aquel entonces gerente general de OAS en el Perú, le informó a su gerente de obras Leonardo Fracassi que había asumido un compromiso con los empresarios Gustavo Salazar y Aldo Belaunde, quienes a cambio del pago de un soborno les garantizaron que la firma brasileña ganaría la licitación para la construcción del Hospital Regional Antonio Lorena del Cusco, según declararon los colaboradores eficaces N° 101 y 105- 2019 a los fiscales del equipo especial Lava Jato. OAS se adjudicó la obra por un valor de S/197’580.499 el 8 de agosto del 2012.
“Gustavo Salazar era operador del señor [Jorge] Acurio Tito, entonces presidente de la región de Cusco; también representaba en su momento al asesor del señor Acurio, Víctor Mayorga [hijo del ex congresista nacionalista y también ex embajador de Cuba, Victor Mayorga]. […] Aldo Belaunde era responsable de garantizar la victoria de OAS en la licitación, según él, por su influencia en UNOPS, aunque no nos haya dicho con quiénes o de qué manera coordinaba con UNOPS [Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos]”, relató el colaborador 101-2019 a los fiscales peruanos que lo interrogaron en Brasil en marzo.
“Aldo Belaunde debería ser remunerado para garantizar que no habría problemas con OAS en la licitación. En total debería repartirse entre […] Belaunde, Mayorga, Acurio y Salazar el 8% del costo directo de la obra”, agregó. El valor referencial de la licitación del Hospital Lorena fue de S/190´000.000, pero terminó adjudicado por S/197’580.499. Es decir, la constructora brasileña pagó S/ 15.8 millones en sobornos.
La obra tuvo un valor final de S/208’474.484, según un informe de auditoría de la Contraloría General de la República. El mismo documento señala que hasta el momento el hospital no ha sido concluido. Solamente registra un avance físico del 65%.
“A Aldo Belaunde le correspondían cerca de US$700.000 que le fueron entregados en dos partes luego de la victoria de OAS en la licitación. La primera parte fue entregada por Leonardo Fracassi en una casa de apuestas de caballos que tenía [Belaunde] en [la avenida] Javier Prado y la segunda parte fue enviada a una cuenta, posiblemente en Europa, no estoy seguro, pero pudo ser en Italia”, reveló el mismo testigo.
“Las entregas de dinero han sido coordinadas y proveídas por el señor Alexandre Portela y la contralodoría [contraloría en español, un departamento de OAS que entregaba dinero para el pago de sobornos. Portela era su encargado]. La cuenta de Europa fue dada al señor Fracassi en un sobre y fue entregada por él a la oficina [de sobornos]”, detalló.
Sobre cómo fue la repartición del pago de OAS a los otros operadores, el colaborador 101-2019 indicó: “Lo restante del dinero se repartía entre Salazar, Acurio y Mayorga. El dinero debería ser entregado por medio de transferencias bancarias y/o contratos ficticios realizados y coordinados por la oficina de [sobornos] [...] para este caso específico como había relación de Gustavo Salazar con empresas aseguradoras [se prepararon] contratos ficticios de seguro que han sido con pólizas cuyos siniestros nunca ocurrirían para generar recursos que eran entregados por esta oficina”.
Acurio se encuentra detenido acusado de haber recibido US$3 millones en sobornos a cambio de entregar la obra de la Vía Evitamiento del Cusco a Odebrecht. Salazar, quien tiene una orden de prisión preventiva por los depósitos por US$1’250.000 que Odebrecht realizó a sus cuentas, hoy se encuentra prófugo.
Asimismo, el colaborador detalló que “por medio de la influencia de Salazar y Mayorga, OAS obtuvo [anticipadamente] los documentos de las bases, lo que le posibilitó de manera distinta tener más tiempo para la elaboración de sus estudios”.
-Las reuniones-Por su parte, el colaborador N°105 relató que a la constructora le parecía excesivo el porcentaje de soborno exigido por la buena pro del hospital. “El monto de 8% del valor de la obra para las coimas le parecía excesivo a Valfredo de Assis, incluso le dijo a Salazar que en el ‘club de la construcción’ se pagaba 3% [de coima] y que con el precio, incluyendo el 8%, sería difícil ganar la licitación, y Aldo [Belaunde] decía que podían controlar de tal forma que podían descalificar a los competidores y que el precio debía ser siempre del 8%”. Y así ocurrió.
“OAS presentó la propuesta con el 8% y quedó primera calificada […] junto con otras empresas y ganaron por el menor precio”, indicó. El Consorcio Salud Moreno, que integraban OAS y las empresas Dextre+Morimoto Arquitectos y Motlima Consultores, obtuvo la licitación.
Asimismo, el testigo ratificó que Belaunde se reunía en su casa de apuestas con De Assis y Mayorga “para hacer las gestiones coordinadas entre Unops y el gobierno regional” y que “Valfredo [de Assis] se reunía con Gustavo Salazar en su oficina que era una compañía de seguros y también en el Café 21 en Miraflores”.
El mismo colaborador indicó que estos pagos ilícitos pueden ser corroborados con otras declaraciones, llamadas telefónicas entre De Assis, Salazar y Belaunde, y los contratos de seguros estipulados por OAS.
Anoche, la Unops, en un comunicado, precisó que “supuestos operadores, intermediarios o terceros, no han tenido y/o no tienen ninguna injerencia en los procesos de licitación” en los que participó. Añade que la entidad no negoció ningún aspecto ni criterio de la licitación del hospital Lorena.
- Descargos-En comunicación con este Diario Jonathan Correa, abogado de Jorge Acurio, negó que su defendido haya recibido dinero a cambio de beneficiar a OAS con la entrega de la licitación del Hospital Antonio Lorena, sino que el gestor habría sido Gustavo Salazar. “A Jorge Acurio Tito no se le ha entregado un sol, no va a existir prueba directa o indirecta que diga que él ha recibido dinero alguno, pueden revisar en sus cuentas […] Estos colaboradores hacen referencia directa a [una] entrega de Gustavo Salazar”.
Por otro lado, la oficina de prensa del estudio Caro & Asociados indicó que Luis Iberico es el abogado de Gustavo Salazar por el caso de la Vía Evitamiento y que el empresario “no tiene abogado por este caso, porque no tiene investigación abierta por el Hospital Lorena, por eso no podrían tratar el tema”.
El Comercio fue a la vivienda de Aldo Belaunde, ubicada en La Molina, a solicitar una entrevista por este caso. Además se le dejó una carta detallando las veces en las que fue mencionado por los colaboradores de OAS de haber recibido dinero, pero al cierre de esta edición no obtuvo respuesta.
Víctor Mayorga Miranda no respondió a nuestras llamadas.