La historia de la Clase C, uno de los modelos más vendidos de la marca alemana, comienza el 8 de diciembre de 1982, cuando se presenta el Mercedes-Benz 190 (W 201), diseñado por el italiano Bruno Sacco y que sería el antecesor directo de la Clase C.
No fue hasta 1993 en que se dio el estreno mundial de la denominación comercial Clase C (W 202), que continuó con la tradición del 190, manteniéndose como el modelo más accesible de Mercedes-Benz.
Esta segunda generación destacó por su interior más grande y confortable con motor delantero longitudinal y tracción trasera o a las cuatro ruedas. Después de unos años incorporó elementos más actuales como el asistente de frenada de emergencia (BAS), el control de estabilidad (ESP) o los airbags laterales.
En el año 2000 se presentó la tercera generación de la Clase C (W 203), un ingreso que llegó cargado de novedades ofreciendo desde el principio las carrocerías sedán y familiar. Entre otras innovaciones técnicas, esta generación incluyó la transmisión de seis velocidades automática “sequentronic”. Esta generación superó las dos millones de unidades vendidas en todo el mundo.
El 2007 Mercedes-Benz presentó, en el Salón del Automóvil de Ginebra, la cuarta generación de la Clase C (W 204) con nuevos estándares en términos de seguridad, agilidad, economía, diseño y confort, con un diseño que rompe con las líneas redondeadas de su antecesora.
En el Salón de Detroit se presentó, en el 2014, la quinta generación de este icónico modelo (W 205). En la actualidad el Clase C 180 cuenta con motor de 1.6 lt. turbo y transmisión automática secuencial de 9 velocidades.