En la carrera por un transporte eficiente y seguro, no han sido pocos los países que han comenzado a probar tecnologías autónomas y cien por ciento eléctricas: Holanda, China y Londres ya han probado unidades de este tipo, con distintos resultados. Sin embargo, Estados Unidos decidió no quedarse atrás y acaba de mostrar a Olli.
Este es un minibús de doce pasajeros completamente eléctrico desarrollado por la compañía Local Motors, que además ha sido fabricado con materiales impresos con tecnología 3-D comenzó sus pruebas a las afueras de Washington D.C., mientras que Miami y Las Vegas han comprado unidades para probarlas hacia fines de año.
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A este esfuerzo se ha sumado la compañía IBM Watson, encargada de la plataforma de inteligencia artificial del vehículo, que le permitirá a los pasajeros interactuar con la unidad, como por ejemplo hacer preguntas sobre el clima y lugares a visitar. De todas formas, cada bus será monitoreado por una persona.
También se ha paneado que el servicio puede ser solicitado por los usuarios a través de una aplicación, tal como los de taxi Uber o Lyft. Por el momento sus pruebas no tendrán costo alguno y se espera que más unidades sean probadas al final del año.