Los hermanos de 14 y 16 años que el 29 de noviembre del año pasado apuñalaron y degollaron a otro menor, en el Cusco, fueron sentenciados a seis años de internamiento en un centro de rehabilitación y al pago de S/.60 mil como reparación civil. Ambos adolescentes homicidas deben someterse además a un exhaustivo tratamiento psicológico y psiquiátrico.
En diálogo con el diario El Comercio, la abogada Aryeni Dongo Chira, indicó que la familia de la víctima consideró injusta la sanción pues “una vida no vale seis años”. Además, explicó la letrada, el mayor de los hermanos tiene 17 años y podría salir libre con beneficios penitenciarios. “Su hermano también podría pedir semilibertad al cumplir los dos tercios de su condena”, refirió.
“Hay muchos vacíos legales en la ley de menores infractores. Porque ¿qué pasa cuándo cumplen 18 años?, tendrían que ir a un penal de reos primarios, pero no es así. Permanecen hasta los 20 años en el centro juvenil y luego son liberados. Por eso es urgente que se modifique la ley para los menores infractores”, reiteró la abogada.
Acotó que tras pasar un análisis, se registró que los dos asesinos padecen psicopatía crónica, es decir, que sienten placer al quitarle la vida a alguien. “Cada tres meses el juez deberá recibir un informe del tratamiento psicológico de los menores”, señaló.
Para perpetrar su crimen, los menores citaron a quien fuera su compañero de clase en su casa, en la urbanización Sol de Oro, donde lo acuchillaron a sangre fría.
La audiencia realizada en el Centro Juvenil de Rehabilitación de Marcavalle estuvo encabezada por el juez Edwin Rómel Béjar del Tercer Juzgado de Familia.