ROSA AQUINO ROJAS / LUCÍA BARJA MARQUINA
Gorros, piñatas, ropa interior y adornos festivos de color amarillo cubren las calles que rodean el Mercado Central del Callao, ubicado en la cuadra 6 de la avenida Sáenz Peña. Desde inicios de diciembre estas vías están cerradas al paso vehicular pues en ellas se han instalado más de un centenar de ambulantes, entre ellos de artefactos pirotécnicos.
Esto ocurre pese a que la Ley 27718, que rige desde el 2002, únicamente permite la venta de cohetes legales en ferias autorizadas por la Sucamec. Y en la capital solo diez ferias cuentan con este permiso.
En los puestos se ofrecen y venden tanto a adultos como a niños los productos deflagrantes: chispitas mariposa, luces de bengala multicolores, trompitos y volcanes. Sin embargo, también se pueden adquirir los llamados chalacones y mamarratas, cohetones prohibidos porque estallan violentamente.
Las municipalidades de Miraflores, San Borja, La Molina y Surco aseguran que fiscalizan la venta de los pirotécnicos en sus distritos. Afirman que multan hasta con 1 UIT (S/.3.700) a las personas que los comercializan.
Sin embargo, es posible conseguir cohetecillos luminosos y detonantes a espaldas del centro comercial Polvos Rosados, en Surco. El parque ubicado en el cruce de las calles Valcárcel y Preciados luce abarrotado de artículos para las fiestas de fin de año, pero estos son una fachada para la venta ilegal de pirotécnicos.
Una colaboradora compró allí luces de bengala por un monto de S/.30 y luego le ofrecieron media docena de las peligrosas mamarratas por S/.55.
Pero este tipo de transacciones no son obviadas por los inspectores municipales. Ayer, al percatarse de la presencia de un fotógrafo de este Diario, les pidieron a los comerciantes que guardaran sus productos.
En los exteriores del Mercado Modelo N°2 de Surquillo también se realiza la venta camuflada. Cualquier niño puede comprar el paquete de cohetecillos a S/.7 y las bombardas a S/.12. Los ambulantes confiesan que pueden traer productos al por mayor si el pedido se hace con un día de anticipación, pues deben acudir a sus proveedores.
Explican que se abastecen en talleres artesanales ubicados en San Juan de Lurigancho y también en la galería El Dorado de Mesa Redonda. ¿Cuál es la hora ideal para conseguir estos artefactos? A partir de las 5 p.m., pues durante la noche la presencia municipal y policial es casi nula en las calles aledañas.
Las vías cercanas a Plaza Norte, en Independencia; el cruce de Aviación con 28 de Julio, en La Victoria; y el mercado Covida de Los Olivos también han sido tomados por los vendedores ambulantes de pirotécnicos. La Defensoría del Pueblo exhortó a los municipios a reforzar la fiscalización en sus distritos para evitar el comercio irregular.